El plazo para instalar el dispositivo venció en diciembre del 2013. Se realizan operativos.
La demanda de los taxímetros homologados en la ciudad continúa. Los conductores que no cuentan aún con estos equipos acuden a las empresas para cumplir con la instalación de los equipos, a pesar de que el plazo para hacerlo venció el pasado 31 de diciembre.
En el norte, en una de las empresas autorizadas que se encuentra en la avenida América y Juan Diguja, la parte externa se convierte en un estacionamiento provisional para los conductores de estas unidades. En promedio, según una de las dependientes, a este lugar a diario acuden unas 30 personas. Hay, incluso, compañías que han reservado el dispositivo con anticipación.
Mario Pazmiño, dirigente de la Unión de Compañías de Taxis Santo Domingo (Ucottax), pertenece a una de estas. Él mencionó que, en el 2013, se realizó un convenio con la empresa para obtener el dispositivo a USD 185. El cronograma para la instalación está previsto que se extienda hasta abril. “Se estima que aquí se pueden colocar máximo 20 taxímetros homologados al día”.
En esta compañía, de los 450 socios, un 80% requiere hacer ya este proceso. El resto (90) recién va a adquirir el dispositivo. En esta empresa, actualmente, el taxímetro homologado cuesta USD 242. Con soporte e instalación el valor suma USD 251.
La instalación
Los dueños de los vehículos se organizan para acudir a las empresas y solicitar la instalación del equipo. En Quito funcionan ocho, de las 12 autorizadas a escala nacional.
La instalación de los taxímetros homologados demora entre una y dos horas. El dispositivo requiere ser calibrado. Para que funcione se lo conecta al velocímetro y a la batería.
En La Magdalena, en una empresa ubicada en la calle Quitus y Epiclachima, en el sur, la demanda es menor.
Piedad Tituaña, técnica que instala los dispositivos, mencionó que a pesar de que el plazo venció no hay mucha concurrencia. En promedio al día van entre dos y tres personas. La mayoría va para hacer mantenimiento del equipo.
Rafael Endara, presidente de la Unión de Cooperativas de Transporte en Taxis de Pichincha, mencionó que de los 8 000 taxis convencionales, alrededor de 6 000 tienen ya los equipos. El gremio espera que una vez que se cumpla con el procedimiento las tarifas de las carreras sean revisadas.
El dirigente comentó que con la implementación de estos equipos, los conductores de taxis requieren hacer otra inversión: comprar rollos de papel para imprimir las facturas. Estos cuestan entre USD 0,80 y 2. Cada uno sirve para emitir alrededor de 100 facturas (original y copia). “El papel podría aguantar un día y medio“, señaló Endara.
Sin embargo, en la capital los usuarios aún no acostumbran a pedir estos comprobantes. Marco Zurita, conductor de un taxi de la Cooperativa García Moreno, mencionó que en el últimos año ha trabajado con el taxímetro homologado, pero sin la impresora. No ha tenido inconvenientes. Sin embargo, él tiene planificado comprar este accesorio en los próximos meses. El facturero cuesta USD 150. Todo el dispositivo, en esta empresa, está valorado en USD 270, incluye un año de garantía.
La Agencia Nacional de Tránsito (ANT) informó que se verificará el uso de estos dispositivos. No hay prórrogas. Los conductores de taxis que no cuenten con estos serán sancionados con 4,5 puntos menos a la licencia y USD 51 de multa. Además, no aprobarán la revisión técnica vehicular.
No olvide
Los usuarios pueden solicitar a los conductores que tienen instalados los taxímetros homologados una factura.
El equipo imprime, en menos de 15 segundos, una factura original para el pasajero y una copia para el conductor del taxi.
Estos documentos pueden servir para justificar en la empresa donde labora los gastos realizados en movilización.