Diego Puente, presidente de Ciclópolis, asegura que el movimiento ciclista ha ganado un espacio importante en la ciudad. Habló de las proyecciones.
Al principio participaron 5 000 personas. Según el último cálculo, cada domingo se movilizan cerca de 50 000 personas.
¿Qué ha ganado en siete años el ciclopaseo?
El ciclopaseo ha permitido al habitante acercarse a la ciudad desde una perspectiva más humana, saludable y alegre. La gente no es simple espectadora, construye la ciudad.
Luego de siete años, ¿todavía hay corrientes contrarias al ciclopaseo?Creo que sí y se van a mantener. Eso nos permite saber que no podemos bajar la guardia. Tenemos que estar activos defendiendo el espacio. También es importante escuchar a las personas. Se han encontrado soluciones a cada observación.
La Ley de Tránsito tiene un capítulo sobre los derechos de los ciclistas. ¿La Policía hace respetar esos derechos?
Ese capítulo lo escribimos nosotros. Propusimos eso en la Asamblea Nacional. Creo que hay un saldo pendiente por parte de la institucionalidad pública. No hay, por ejemplo, unidades especializadas en la Policía que vigilen el cumplimiento de los derechos de los ciclistas. Es una Ley que no ha logrado nacer aún.
¿El Municipio todavía quiere apropiarse de la organización de esta actividad?
Hubo una primera intención de absorber el ciclopaseo en la nueva administración. Nunca se concretó una propuesta formal. El alcalde Augusto Barrera, hace unas semanas, ratificó que sería una locura municipalizar el ciclopaseo. La actividad está funcionando bien con pocos recursos.
¿Esta actividad genera recursos económicos?
Tenemos algunos auspiciantes que hacen publicidad en el ciclopaseo. Eso ayuda a llenar los huecos dejados por la demora en la entrega de recursos por parte del Municipio. El presupuesto de este año es de USD 300 000. Solo hemos recibido un 10% de ese presupuesto.
¿No hay intereses económicos o políticos detrás del manejo del ciclopaseo?
Nuestro interés es promover la bicicleta y, obviamente, sostener financieramente la institución y fortalecer Ciclópolis. Entendemos que es un espacio político. Pero hemos tratado de mantenerlo aislado de la política partidista.
En la ciudad hay otras organizaciones que impulsan el uso de la bicicleta. ¿No es un trabajo desarticulado?
Hay un montón de organizaciones. Cada una tiene su forma de concebir el trabajo. Falta madurar un poco la relación.
¿Por qué la bicicleta se usa más para una actividad dominguera que como medio de transporte alternativo?
Porque el domingo hay las condiciones. El domingo es el laboratorio de la movilidad no motorizada. Entre semana la fakeFCKRemovegente está en otra dinámica. Ir al trabajo, madrugar, llevar a los niños a la escuela. Lo que pasa el domingo se puede trasladar a entre semana generando seguridad.
¿Hay una cultura de seguridad entre los ciclistas que usan este vehículo?
Tenemos cerca de 50 accidentes por año. Un 5% son graves. Es decir que se rompen huesos o hay fracturas. Los accidentes se producen entre ciclistas. Ventajosamente no hemos tenido ningún fallecido. Hay ciclistas que han muerto, pero no ha sido en el ciclopaseo.
¿Cuáles son las proyecciones del ciclopaseo?
Algunas. La revisión de horarios y rutas. Por ejemplo, plantear ir por la av. Veintimilla hasta La Floresta. En el sur llegar hasta Guamaní. En el norte, por la Machala, hasta el Parque Inglés. Hay que repensar esos temas con el apoyo del Municipio.