Ayer, Xavier Paucar revisaba su perfil en la página web de la red social Facebook. Lo hacía desde una computadora portátil, en medio de la Plaza del Teatro.
Ese fue uno de los dos sitios en los cuales se inauguró el servicio de Internet inalámbrico sin costo en el Centro Histórico. El otro punto de servicio está ubicado en la Plaza Grande.
La iniciativa fue propuesta por el concejal Jorge Albán, en agosto de este año, y desarrollada por la Dirección Metropolitana de Informática. El propósito, dijo Albán, es facilitar el acceso a Internet a la población desde los espacios públicos.
Luz Elena Coloma, gerenta de Quito Turismo, aseguró que el impacto del servicio sobre el turismo será positivo. “Esto debido a que los turistas están acostumbrados a un acceso libre a Internet en los espacios públicos”.
Las páginas web que visitaba Johanna Herrera se desplegaban rápidamente y sin problemas. Para la estudiante del Colegio Fernández Madrid, el acceso gratuito a la red desde los espacios públicos es una herramienta que puede acercar más a las personas a las nuevas tecnologías.
A ella le preocupa la seguridad de los usuarios y sus equipos portátiles frente al riesgo de robos.
Albán explicó que el Municipio está desarrollando un plan de seguridad en varios niveles. El principal consiste en reducir el mercadeo ilegal de aparatos electrónicos. También se aplicará una campaña de prevención entre los usuarios y se reforzará la presencia de policías nacionales y metropolitanos en los sitios donde se ofrezca el servicio.
Para acceder al servicio, solo se necesita activar el sistema Wi-Fi de un computador o de un teléfono. Los usuarios podrán consultar sitios web, servicios de chat, redes sociales, entre otras. También estará habilitada la descarga de archivos. Sin embargo, la conexión será canalizada a través de la Dirección Metropolitana de Informática, en la cual se filtrará el contenido que vaya en contra del buen uso de esta herramienta.
Arianna Drouet, estudiante del Colegio Fernández Madrid, ingresaba sin problemas a varias páginas web desde un computador de prueba instalado ayer en la plaza.
Para ella, el acceso a Internet es fundamental en sus actividades académicas y sociales. El correo, chat, redes sociales y páginas especializadas de consulta son las más visitadas por esta alumna del tercer año de bachillerato.
Para Paucar, mantenerse en línea le permite intercambiar opiniones y hacer consultas entre otros compañeros sobre sus tareas. “Sería bueno que también los profesores establezcan horarios de tutoría por Internet”.
El alcalde Augusto Barrera explicó que la iniciativa es parte del programa de puntos seguros con una inversión de aproximadamente USD 100 000.