Un nuevo incendio forestal se sumó a la lista de los 2 413 siniestros registrados en Quito desde el 1 de junio hasta el martes. Ayer, el escenario fue Chaguarquingo. Al mediodía, el humo no se despejaba ni el temor de los vecinos del barrio del sur de la capital. Las llamas se habían encendido a menos de 20 metros de la gasolinera ubicada en el sector.
Con el inminente riesgo, los trabajadores de la estación de servicio no dudaron en tomar los cinco extintores y correr a la ladera, ubicada sobre el pasaje N- De la Bastida, contó Leonidas Garcés, empleado de la estación. “A las 12:00, empezamos a ver que salía humo y llamamos a los bomberos”. Si bien la gasolinera era el sitio que corría mayor peligro, en los alrededores del incendio hay un puñado de viviendas.
A las 12:30, las llamas fueron controladas por seis bomberos. A la zona también acudieron cinco policías nacionales y 10 metropolitanos.
La nube de humo se divisaba desde la Villa Flora y desde El Recreo. Tanto así que uno de los trabajadores de la gasolinera, Miguel Guerra, quien se encontraba en el sector de la terminal sur del Trole, pensó que se quemaba la estación y se unió a las labores para sofocar el fuego.
Carlos Yugsi, del Cuerpo de Bomberos de Quito, explicó que al igual que ha ocurrido en la mayor parte de los siniestros, no se llegó a detectar el origen o quien provocó el incendio.
Hubo moradores que dijeron que fue un grupo de muchachos. La versión no fue confirmada por las autoridades. Yugsi informó que el peligro había pasado “a menos que alguien lo encienda intencionalmente”.
Según el bombero, cerca de 2 hectáreas se consumieron. Estas se suman a las 2 311 devastadas por las llamas, desde junio en Quito.
Ayer, el fuego también llegó al sector de la Argelia Baja, arriba de la fábrica Tanasa. El barrio fue afectado por un incendio que empezó a las 11:45 y se expandió por una ladera.
Unos 15 vecinos se unieron para combatir las llamas. Con mangueras y baldes en mano, ellos se apresuraron a subir por la ladera. Los niños no se quedaron fuera y colaboraron para sofocar el siniestro, pasando baldes con agua.
A las 12:20, llegaron seis bomberos con una motobomaba. Según el reporte de la Estación 6 del Cuerpo de Bomberos, se trató de un siniestro de nivel uno, es decir, considerado de menor magnitud. Las tareas de sofocación continuaron hasta las 13:00.
De acuerdo con las versiones de los vecinos, tres jóvenes causaron el fuego. Beatriz de Mosquera señaló que antes de que se iniciaran las llamas, tres personas salieron entre los matorrales. Al poco tiempo se empezó a consumir la ladera y apareció el humo.
El fuego no afectó a las viviendas, pese a que es un sector poblado. La indignación entre los moradores fue evidente. Pablo Zurita, molesto y preocupado, comentó que uno de los presuntos responsables estaba bajo efectos de drogas. “Entre las ramas se esconden y para ellos es un juego. Es un daño terrible al sector y al ambiente. Hay que hacer algo”.
Continúan activos los incendios en el Pasochoa, Pululahua, Chiriboga, Maquipucuna y Atacazo. Ayer, hasta el mediodía se registraron nueve siniestros en el Distrito Metropolitano. Bomberos, militares y policías trabajaban en las labores de sofocación.
El incendio del Pasochoa, según se indicó en un informe del COE, está controlado en un 90%. En el lugar trabajan ocho bomberos y 35 miembros de Fuerzas Armadas. Hay dificultades para acceder según los bomberos.
La ayuda
Apoyo. Para ayudar en la emergencia del Distrito esta semana llegaron dos helicópteros provenientes de Venezuela. El uno es un Súper Puma y el otro un Cougar, los dos están equipados con el sistema bumbi bucket para llevar agua.
Reporte. La mañana de ayer se registraron nueve incendios en la ciudad, según informó el Municipio.
Otros siniestros. En el incendio del sector de Chiriboga trabajan 10 bomberos, 57 elementos de FF.AA, nueve brigadistas. Se han realizado seis descargas desde el helicóptero.
A las 12:02 de ayer se reportó otro fuego en la Ferroviaria, en el sur.