Las personas mayores relataban sus historias y recuerdos a los jóvenes y niños. Las fotografías del Quito antiguo, que se exhiben en el bulevar de las Naciones Unidas, en el norte, traían a la memoria de Marcelo Echeverría, quiteño de 78 años, recuerdos de su infancia en San Roque, en el Centro.
Él se detenía detrás de cada fotografía y relataba los sucesos que ocurrieron en esos lugares de antanio plasmados en las fotografías. “Las piedras de la calle Espejo eran de río, casi como todas las calles de la ciudad. El Centro conserva su arquitectura original. Es hermoso ver esta exposición”.
Para Elisa Calderón, guayaquileña radicada en la capital desde hace 30 años, las fotografías revelan a Quito desde sus inicios. “Mi hijo se asombró al ver la imagen de cómo era La Ronda en un inicio. Yo recuerdo el estado en el que se encontraba antes de la regeneración. Son cosas que una revive al ver estas fotografías”.
Las historias se siguen tejiendo detrás de cada imagen. Echeverría recuerda cómo eran los uniformes de los jugadores de fútbol al ver una fotografía de un equipo de la ciudad, en1902. “Cuando era niño los zapatos eran muy duros. El balón era de cuero y era muy pesado y cuando se mojaba era peor. Pero así jugábamos”.
Jóvenes sosteniendo bastones, y con sombrero y ternos oscuros recorren la Plaza Grande en una imagen de 1867.
Para Patricio Solano, quien observaba la exposición junto con su esposa Rosmira Alzate, no solo la ciudad ha ido cambiando a través de los años. También la gente, costumbres y tradiciones han perdido su esencia. “Es una forma de recoger lo que es la ciudad hoy y lo que se perdió. Por lo menos nos quedan fotografías para imaginarnos lo que fue Quito”. Solano recuerda los lugares y a una sociedad más solidaria y apegada a los principios morales.
Los jóvenes reconocen pocos lugares de las fotografías. La arquitectura de calles y casas es ahora irreconocible para ellos. Para Pablo Romero de 21años le resulta increíble vivir cerca de una quebrada donde ahora se asienta la calle 24 de Mayo, en el Centro.
“No sabía que ese sector antes era una quebrada. Es imposible. Al ver todo esto me siento muy feliz de haber nacido en esta ciudad y me gustó mucho la exposición”.
La Recoleta, la piscina pública en el sector del Sena, el Palacio de Gobierno, la pileta de la plaza de San Francisco, también son parte de la exhibición del bulevar.