La donación de órganos es una actividad muy poco conocida y difundida en la ciudad. Sin embargo, existen cientos de pacientes que permanecen en listas de espera, aguardando un órgano que les permita continuar viviendo.Para incentivar y resguardar la donación de tejidos humanos se creó el Organismo Nacional de Trasplante de Órganos y Tejidos (Ontot). Desde hace 10 años, esta entidad ha tratado de crear una base de datos de personas que estarían dispuestas a dar sus órganos luego de su muerte o incluso en vida. Álvaro Salgado siempre ha tratado de unirse a una red de personas donadoras. La falta de información sobre los organismos encargados de esa actividad le han impedido obtener su carné de donador.El pasado miércoles, Salgado recibió una charla sobre la entrega de partes. Esta vez no dudó y se inscribió en las listas del Ontot. Ahí le entregaron un pequeño documento que lo certifica como voluntario. Para ser donador de órganos, una persona debe acudir a las oficinas de la Ontot, ubicadas en la av. De la Prensa N900 y Edmundo Carvajal, en el norte. Ahí debe llenar un formulario donde constan los datos personales, el tipo de sangre, el sector donde vive, el nombre de un familiar cercano, entre otros. También se puede registrar en la página web www.ontot.gov.ec. El carné se lo obtiene en menos de 2 minutos. El documento no tiene valor alguno. El certificado solo es un respaldo de la decisión de quien se inscribe en el programa. Para que la donación se haga efectiva, luego del fallecimiento de la persona, la familia debe ser quien autorice la donación. Si los parientes se rehúsan, la extracción de los órganos no se realizará.Por esta razón, Salgado aseguró que conversará con su familia para explicarles su deseo “de ayudar a los demás”. Para ser donante no existe un límite de edad. Solo luego de la muerte del paciente se puede determinar si sus órganos son aptos para un trasplante o no. La extracción de las partes no tiene ningún costo para los familiares, el Ontot asume todos los gastos de la extracción.