El jueves pasado, se inauguró la primera capilla que estará abierta las 24 horas del día. La Capilla de los Ángeles, como la nombró Fernando Rea, sacerdote de la parroquia, es una réplica de la iglesia Nuestra Señora de Fátima.
El pequeño templo está ubicado en el extremo norte de la iglesia. El ruido de los vehículos que transitan por el sector es constante, por la avenida Eloy Alfaro. Por eso se construyó una cámara de vidrio, que aísle la bulla. Para entrar a la capilla, hay que atravesar dos puertas de ese material.
El sitio no tiene decoración interna. Solamente hay un cuadro que simula el cielo, que está colgado en la parte frontal. A la entrada hay una fuente de agua con la imagen de la virgen de Fátima.
También al ingreso hay dos esculturas en forma de ángeles que custodian la entrada. Para Rea, los ángeles juegan un papel importante en la vida de la comunidad creyente. Según el sacerdote y párroco, cada persona cuenta con un ángel custodio, encargado de acompañar el camino de los fieles desde el momento de su concepción hasta su muerte.
A las 10:15 del viernes, seis de los 20 reclinatorios eran ocupados por los fieles de la parroquia. Liliana Cruz, de 40 años, contemplaba la capilla desde afuera. “Es un lugar hermoso y tranquilo, para que las personas podamos acercarnos a Dios por medio de nuestras oraciones”, dijo.
Con esto coincide Julio Díaz, quien llegó acompañado de su esposa Laura Garzón desde el sur de la ciudad para visitar la capilla. Para él, el sitio es un lugar donde se siente paz y también la presencia de Dios. Una hora permaneció la pareja en la capilla, Ellos aplauden la iniciativa del padre Rea de crear un lugar así.
Desde su inauguración, el templo permanece abierto las 24 horas del día. Rea comentó que la Capilla de los Ángeles es un sitio continuo de reflexión. “Los fieles pueden venir a cualquier hora del día, noche e incluso en la madrugada”. Para cuidar a los fieles se contratará vigilancia privada.
El objetivo de la construcción de esta capilla y su horario ininterrumpido es que el sitio permanezca siempre ocupado. Los fieles se pueden inscribir para dedicar una hora de su tiempo a la reflexión. Se puede realizar el registro en la casa parroquial de la iglesia de Fátima, que rige la capilla, dependiendo de su tiempo.
Hasta la fecha, 360 personas se han inscrito para elevar sus oraciones durante una hora, en la nueva capilla.
La iglesia invirtió USD 60 000 en la construcción del nuevo templo. Gran parte de la financiación de la obra se consiguió por donaciones de los devotos que acuden a escuchar misa en esta iglesia del norte de Quito.