El asombro y la alegría de quienes viajaban en el segundo piso de uno de los tres nuevos buses turísticos eran evidentes en sus rostros.
Como si fuera una ciudad desconocida, los pasajeros tomaban fotos de cada lugar en el cual el bus hacía una corta parada para que uno de los guías explicara la historia de los sitios turísticos.
Gabriela Suasnavas, representante del museo Santa Catalina, dijo que es una buena oportunidad para conocer Quito durante la noche, sin peligro y con todas las seguridades que ofrecen esos buses. El punto de partida del recorrido inaugural, que se realizó en la noche del lunes, fue el parque El Ejido.
Mientras los pasajeros esperaban ansiosos la salida de los dos buses, los organizadores del Quito Tour Bus soltaron decenas de globos de colores. Fue el anuncio para el inicio del tour.
Carlos Narváez, organizador, señaló que cada bus tiene una capacidad para 65 personas, 40 en el primer piso y 25 en el segundo. No se permite, además, que estos viajen de pie. Al recorrer la avenida Patria, hacia el occidente, el guía del recorrido explicó sobre la historia de la Universidad Central, ubicada en la av. América. Luego, el chofer tomó la Versalles para ingresar al Centro.
Entre relatos de historias, risas y el tradicional grito ¡viva Quito!, las actrices de la comedia Las Zuquillo entretenían a los pasajeros.
El recorrido llegó hasta la calle García Moreno, a la parte posterior de la Iglesia de la Basílica. La parada fue inevitable. Se contó la historia y los detalles de la construcción del templo. Los pasajeros tomaban fotografías.
Más hacia el Centro, el guía contó la historia de la Calle de las Siete Cruces. Durante este trayecto, las miradas, sonrisas y saludos de las personas de los balcones y las calles alegraban a los pasajeros.
El paseo en el bus turístico cuesta USD 12 adultos y USD 6, niños y personas de las tercera edad.