Taxistas informales bloquearon una vía en el barrio Lucha de los Pobres, para reclamar por las multas de las sanciones de tránsito. Foto: EL COMERCIO
En la Lucha de los Pobres, en el sur de Quito, dos grupos se encuentran en conflicto. Por un lado están los taxistas irregulares que prestan el servicio en el sector y que señalan que constantemente son sancionados por los agentes civiles de Tránsito; mientras, por el otro están los taxistas formales que piden parar con este servicio irregular.
La mañana del miércoles 2 de marzo del 2016 se registró una protesta de los taxistas irregulares en la calle 21 de Agosto, a la altura de la Unidad de Policía Comunitaria (UPC) de la Lucha de los Pobres, en el suroriente de Quito.
Desde las 08:30 hasta las 10:00 bloquearon totalmente la vía. Por pedido de la Policía, los manifestantes abrieron un carril para permitir el paso de los vehículos durante media hora más. El grupo esperaba que los dirigentes terminen una reunión.
60 propietarios de vehículos se apostaron a lo largo de la 21 de Agosto. La consigna fue “la Lucha unida, jamás será vencida”. Ellos reclamaban los controles de los agentes y las “excesivas multas” que deben pagar.
Manolo Paredes, dirigente de los conductores que cerraron la vía dijo que no son taxistas irregulares. “Somos un grupo que presta el servicio desde hace varios años”. Él manifestó que no buscan la regularización; sino que les dejen trabajar junto con la comunidad ya que, aseguró, el servicio de taxis formales no realiza un buen servicio.
Paredes aseguró que en lo que va de la semana los agentes de tránsito han detenido a 12 vehículos. “Las multas son de USD 700 y además pagamos USD 300 del abogado. En total son USD 1000″, comentó al terminar la reunión.
El dirigente no quiso dar detalles sobre la reunión que tuvieron en una casa del sector. Lo que dejó en claro es que esperaran a que concluya el estudio que el Municipio debería iniciar en abril de este año para saber si pueden ingresar (si las conclusiones del estudio así lo determinan) a un posible nuevo proceso de regularización.
En el otro lado de este conflicto están los taxistas formales. José Pincha, presidente de la cooperativa Translucha Alta, señaló que el servicio irregular los perjudica. Él señaló que sí prestan el servicio hasta la parte alta de este barrio.
La población está dividida. Aquellos que apoyan a los conductores de los vehículos que operan sin documentos dicen que el precio es cómodo ya que pagan 25 centavos para subir desde la Maldonado hasta casi la avenida Simón Bolívar. La tarifa que cobran los taxis formales es de USD 40 por esta ruta. El precio baja si es que las personas se quedan más abajo.
Quienes apoyan a los taxistas formales sostienen que hay seguridad. También señalan que el otro grupo se toma las veredas cercanas para estacionar sus vehículos. Ellos dicen que sería mejor incrementar unidades de buses para terminar con el conflicto.
Paredes señaló que desde que el alcalde Mauricio Rodas estuvo en una concentración, en la Tribuna del Sur, con el gremio de taxis formales, los controles se han intensificado y han aumentado el número de sancionados.
A las 11:00 terminó la reunión de los taxistas informales y la gente se retiró de la vía. El tránsito a esta hora es fluido.