Este jueves 8, Galo Lara, asambleísta de Sociedad Patriótica, no intervino en la sesión 139 del Pleno. No necesitó hacerlo. En una semana logró despertar el llamado ‘espíritu de cuerpo’ entre sus compañeros que, con 70 votos entre 124 legisladores, evitaron que perdiera la inmunidad.
El jueves primero, el legislador de Los Ríos alertó a la prensa de un supuesto intento de Alianza País de esconder un pedido de la Corte Nacional de Justicia, desde el 10 de noviembre pasado.
El objetivo: permitir que Lara pierda la inmunidad, dejando que el pedido de la Corte entrara por el ministerio de la ley. Es decir, sin discutir la solicitud para iniciarle causas penales, planteadas por el presidente Rafael Correa y la ministra Ximena Ponce.
Esto porque la Asamblea tenía 30 días para pronunciarse y el presidente Fernando Cordero, según él, no le había informado sobre la existencia de esa solicitud.
En esta semana, Lara consiguió que se debatiera sobre la importancia de la inmunidad. Y se paseó por los medios de comunicación y las redes sociales ratificando que: “Rafael Correa engríe y protege la corrupción desde Carondelet”. Esta idea fue la que motivó a que el Presidente entablara la demanda penal por injurias.
María Paula Romo, ex Alianza País, apuntó que Lara no era “un asambleísta de intervenciones moderadas”. Pero se centró en un hecho: él hizo esas declaraciones como parlamentario y no fuera de sus funciones.
Romo también justificó la molestia de Correa. “A nadie le gustaría que le dijeran que comanda la corrupción”. Pero recordó que él mismo habla frecuentemente de “prensa o jueces corruptos”.
Ella y Betty Amores, ambas ex oficialistas, pidieron recordar como Junior León, ex diputado roldosista perdió su inmunidad. Él disparó a alguien en una discoteca. Nada que ver con este caso.
En siete días, el asambleísta del PSP hizo que sus compañeros se pusieran en sus zapatos. Repitió que todos podían estar en su lugar… Habló de una lista de futuros demandados desde Carondelet. Y así, atrajo el respaldo, incluso de siete independientes, que suelen votar junto al bloque de A. País.
Además logró que Guillermina Cruz y Rocío Valarezo, tradicionales aliadas del oficialismo, se abstuvieran en la votación. Igual que Henry Cuji. Washington Cruz, conocido como ‘Hunter’ (si se va, viene) también votó en contra de que Lara pierda la inmunidad y estuvo en el almuerzo, en el restaurante Happy Panda, en el norte de Quito, donde algunos legisladores celebraron.
El discurso de Cordero y de todo el oficialismo de que “inmunidad no es igual a impunidad” no caló.
“Cuánto ganaría el Ecuador si quienes quieren fiscalizar lo hicieran sin estridencias ni adjetivaciones, sin suplantar a jueces ni fiscales. Hay que aprender a tener más firmeza y a bajar el tono”, dijo en el Pleno, Cordero. Pero el ex Madera de Guerrero, Enrique Herrería, le respondió: “Lo único que nos queda ahora son las declaraciones. Los funcionarios no nos dan información”.
Hace una semana, Virgilio Hernández (A. País) ya señaló que era partidario de evitar “judicializar la política” porque “se victimiza a quienes quieren sacar provecho de las calumnias”. Pero su bloque se concentró en defender la honra del presidente Correa.
Al final, Lara apareció como el ganador, repitiendo que “continuará con la fiscalización”. Mientras, en Twitter, Correa habló de la posibilidad de someter a consulta popular el mantenimiento de la inmunidad parlamentaria.
Quién es
Asambleísta de Sociedad Patriótica, también estuvo en la Constituyente de Montecristi. Integra, por segunda ocasión, la Mesa de Fiscalización. Suele llevar carteles con frases irónicas.
lLo que dijo
“No hay acuerdo por la democracia sino para comprar conciencias señor Presidente, aquí hay una sólida oposición al Régimen dirigido por Rafael Correa, quien comanda la corrupción desde Carondelet”
Lo que hizo
El jueves 1 de este mes denunció que Cordero había escondido un pedido de la Corte Nacional para iniciarle dos demandas penales, desde el 10 de noviembre. El 11 de diciembre terminaba el plazo.