La secretaria ejecutiva de Alianza País, Doris Soliz, delineó ayer 5 de mayo, las primeras acciones de su gestión al frente de la organización política más grande del país.
Lo hizo después de que presentara su renuncia al Ministerio de Inclusión Económica y Social, que dirigía desde el 23 de abril del 2012.
Una de sus primeras medidas será examinar los expedientes disciplinarios abiertos en contra de militantes del movimiento de Gobierno.
Para ello, ya ha pedido un informe al Comité de Ética de la Lista 35, para conocer en detalle los casos que han llegado a esa instancia, así como el estado en que se encuentran.
“Ha habido temas de deslealtad política que deben ser juzgados y otro tipo de denuncias que se reciben y que deben tener el debido proceso”, dijo ayer la dirigente, en su despedida del despacho del Ministerio de Inclusión.
Hasta antes de la convención nacional de la semana pasada en Esmeraldas, el Comité de Ética de Alianza País era presidido por Carlos Marx Carrasco, actual ministro de Relaciones Laborales.
El anuncio de poner la casa en orden en materia disciplinaria de Soliz se da después de repetidas críticas del presidente Rafael Correa, sobre problemas internos tras las elecciones locales del 23-F.
De hecho, el líder del movimiento oficialista señaló que en las directivas provinciales hubo mala selección de candidatos, mala organización y sectarismo. No obstante, Correa no ha especificado que hubiesen problemas de alejamiento de la línea programática de A. País.
El único caso disciplinario público fue el de las asambleístas Paola Pabón, Gina Godoy y Soledad Buendía, a finales del 2013. Ellas fueron suspendidas un mes en sus funciones legislativas, por irrespetar acuerdos políticos internos sobre el tema del aborto durante la aprobación del nuevo Código Penal.
El viceministro Fernando Terán sustituye a Soliz en el Ministerio de Inclusión.