Las playas de la prefectura de Fukushima fueron reabiertas al público, después de 8 años de que ocurriera el tsunami que devastó esa zona de Japón en 2011. Foto: AFP
Dos playas situadas en el noreste de Japón que quedaron devastadas tras el tsunami de 2011 han sido abiertas este sábado 21 de julio del 2018 al público, tras comprobar que los niveles de radiactividad eran adecuados ocho años después del desastre.
La reapertura de las dos playas, situadas en la ciudad de Soma (prefectura de Fukushima) y en Ishinomaki (prefectura de Miyagi), coincide con una ola de calor que azota al país asiático desde la última semana y que ha causado al menos 30 muertos.
Estas zonas costeras recibían durante los meses de verano entre 30 000 y 50 000 visitantes antes del fortísimo terremoto de 9 grados en la escala de Richter y posterior tsunami que causó el desastre de la central Fukushima Daiichi, según cifras de la agencia japonesa Kyodo.
Los controles de calidad realizados por las autoridades locales de Soma desde 2015 han demostrado que los niveles de radiactividad se encuentran por debajo de los mínimos establecidos por la normativa de seguridad de la playa.
También se han reconstruido los diques que quedaron dañados y eliminado los materiales que fueron arrastrados a la costa tras el tsunami.
El desastre del 11 de marzo de 2011, el peor de la historia reciente de Japón, ocasionó 18 000 muertos y decenas de miles de personas desplazadas, así como graves daños a la economía local y las arcas públicas.