Madrid, AFP
El proyecto de ampliación de la ley del aborto en España no incluirá finalmente su punto más polémico, que las menores entre 16 y 18 años pudieran abortar sin avisar a sus padres, indicaron este jueves fuentes parlamentarias.
El Partido Nacionalista Vasco (PNV, moderado) anunció este jueves en un comunicado que “votará previsiblemente a favor del Proyecto de Ley de Interrupción voluntaria del embarazo al incorporarse al texto final las reivindicaciones planteadas ” por él.
El punto más controvertido era que las jóvenes entre 16 y 18 años podrían interrumpir un embarazo sin informar previamente a sus padres, a lo que se niega el PNV.
Este partido ha conseguido finalmente que la ley incluya “la obligatoriedad de informar de la intervención al menos a uno de los padres, tutores legales o en su caso los ostentadores de la patria potestad de las embarazadas de 16 y 17 años”.
Sin embargo, se ha incluido una excepción: si la transmisión de esta información pone en peligro a la menor.
El apoyo del PNV permitiría su aprobación en el Congreso a pesar de la oposición de los conservadores del Partido Popular (PP) , respaldados por la Iglesia católica.
El acuerdo del PNV permitirá a los socialistas, que sólo cuentan con una mayoría relativa en la cámara (169 de un total de 350), sumar los seis escaños vascos a los dos de los ecocomunistas.
El proyecto de ley dio un paso más este jueves en el Congreso de los Diputados al ser aprobado en la comisión parlamentaria de Igualdad.
La nueva ley contempla que el aborto sea libre hasta la decimocuarta semana de embarazo, un plazo mayor que en algunos países europeos, y que se autorice hasta la 22ª semana si hay riesgo para la salud de la madre o malformación del feto.
Después de la 22ª semana se podrá abortar si se detecta una enfermedad grave e incurable en el feto.
Además “recogerá el reconocimiento expreso del derecho a ejercer la objeción de conciencia de los profesionales sanitarios directamente implicados en la interrupción voluntaria del embarazo (…) sin que el ejercicio de tal objeción de conciencia pueda suponer un menoscabo del acceso y la calidad asistencial de la práctica del aborto”, añade, sin precisar cómo se hará.
La actual ley, en vigor desde 1985, permite abortar durante las primeras 12 semanas por violación, por malformación del feto durante las primeras 22 y sin un límite en caso de “peligro para la salud física o psíquica de la madre”, lo que permitía realizar abortos bien avanzada la gestación.