Ma. Fer
Mejía Y.
Sección Jóvenes
Que el amigo secreto, que la cena con los panas de la escuela, que la reunión con los primos, que la cita con el pelado… ¿Para todos regalo?
Está bien que la época te emocione, pero no exageres. Aunque todos los años muchos lo repiten, no está demás decirlo: no hagas que esta Navidad sea un año más de puro consumismo.
Empieza diciembre y todo el mundo se vuelve loco. Los sentimientos se miden por una caja de chocolates y el estrés se apodera de la gente. Los centros comerciales no se abastecen con tantos compradores.
Lo peor de todo es el dolor de cabeza, no solo por estar en medio de ríos de gente, sino por pensar que en plena crisis económica, debes gastarte lo último de tu chanchito en puros regalos. Lo más feo es que debes obsequiar por compromiso.
Si algo quieres regalar, cambia esa mala cara, ahorra y enfoca todas esas energías en buen ánimo para la familia y los panas…