El ‘boom’ de compras que suele registrarse los días previos al segundo domingo de mayo está ausente en floristerías, restaurantes y centros comerciales de Quito.
El Día de la Madre ha sido desplazado del pensamiento de la gente por la consulta de mañana. “Hemos invertido el doble de tiempo, dinero y esfuerzo en publicidad para esta fecha porque todo el mundo parece haberla olvidado y solo piensan en la consulta. Nuestras ventas han sido similares a un día normal del año”, dice Cecilia Vega, administradora de la empresa Fres Flor.
Cinco floristerías consultadas señalaron que sus ventas han bajado entre el 30% y el 40% en esta temporada respecto al año pasado. La disposición del Gobierno, de trabajar hoy media jornada en el sector público, también ha influido en las ventas. Pedro Guamán, propietario de Status Floristería, contó que en esta temporada ha recibido pedidos de tres instituciones públicas, cuando antes sumaban 20. Muchas no realizarán programas en esta fecha porque trabajarán medio tiempo.
Orquídeas Floristería registraba hasta mediados de abril el 30% de los pedidos por el Día de la Madre, pero en este año solo tienen vendido un 6%, señaló Carolina Muzo, administradora.
Esta situación obligó a los negocios a promocionar más sus productos en medios de comunicación, redes sociales y hojas volantes. También realizaron alianzas con empresas de comida rápida, de cuidados de belleza y tarjetas de crédito, para armar combos y motivar a sus clientes a comprar.
Pese a estas estrategias Status Floristería prevé vender en esta temporada 5 000 arreglos, un 37% menos que el año pasado.
Con la reducción de la demanda las floristerías han bajado los pedidos a sus proveedores, ocasionando que los precios caigan. En años anteriores el paquete de 25 rosas se adquiría en USD 9 y hoy no pasa de USD 5, dijo Muzo.
Al igual que las floristerías, los restaurantes y las licorerías se han visto afectadas, en este caso por la ley seca que rige dese ayer y que se extenderá hasta el domingo 8.
La gente acostumbra celebrar el Día de la Madre desde el viernes, con almuerzos y cenas que incluyen vino. “Hoy lo harán con un vaso de agua”, comenta Sara Maldonado, asistente administrativa del restaurante Boca del Lobo.
Las reservaciones en los restaurantes han disminuido respecto al año pasado, pues muchos clientes se trasladarán a otras ciudades para votar y otros preferirán regresar a casa luego del sufragio. A pesar de esto, restaurantes de hoteles como el Sheraton y Swissotel se preparan con shows en vivo y menús especiales para el próximo domingo.
En los centros comerciales, si bien hay una mayor afluencia de clientes, las ventas no igualan a las temporadas pasadas. La gente no sabe qué pasará con la consulta y prefiere no gastar, cuenta Genoveva Gómez, del local Boots’n Bags (CCI), donde cinco vendedores uniformados esperan sentados que lleguen los clientes.