La agencia de calificación financiera Standard & Poor’s recortó el martes 30 de octubre la nota de la deuda soberana de Argentina de “B” a “B-” a raíz de los “crecientes riesgos” financieros que atraviesa el país.
S&P enumeró el fallo de un tribunal de apelación estadounidense rechazando un recurso de Argentina para frenar una decisión de un juez que le exige el pago por bonos de su deuda en default, así como la decisión de dos de sus provincias de abonar en pesos deuda emitida en dólares.
La agencia cita además la retención de la fragata “Libertad” en un puerto de Ghana desde el 2 de octubre por orden de un juez de ese país, que aceptó un reclamo del mismo grupo de inversión que lanzó la demanda en Estados Unidos.
Estas cuestiones “ponen de relieve los crecientes desafíos que el gobierno continuará enfrentando para diseñar su política económica y de manejo de la deuda”, según un comunicado.
La decisión de S&P tuvo lugar poco después de que otra agencia de calificación financiera, Fitch, colocase “bajo vigilancia negativa” la nota de la deuda argentina a largo plazo, actualmente en “B” (muy especulativa).