Los textiles incautados el 2013, como parte del contrabando que ingresa al país, sumaron USD 8,1 millones, cifra que preocupa a empresarios y a autoridades.
Y no es solo por la cifra, sino especialmente por dos razones: una, porque el monto de aprehensiones se ha mantenido estable en los últimos años alrededor de ese monto y, dos, porque estas incautaciones son una décima parte de lo que se presume ingresa ilegalmente.
El año pasado, el país importó USD 302,1 millones en textiles, por ello el monto que ha logrado detectarse como ilícito constituye el 2,6%. Esto no sería mayor problema, de no ser porque en el mercado circulan volúmenes de ropa mucho mayores a los que se declaran.
Además, las aprehensiones de mercadería de contrabando en el rubro textiles triplica a lo que se incauta por otros productos como licores, cosméticos, productos electrónicos, entre otros.
Javier Díaz, presidente de la Asociación de Industriales Textiles del Ecuador (AITE), explica que existen varias vías por las cuales ingresa la mercadería al país: fronteras, aeropuertos e incluso el sistema 4×4 (que permite realizar compras por Internet de 4 kilos o USD 400 sin declarar) podría ser tildado de ilegal.
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A esto se suma la subfacturación, que es otro grave problema que, pese a los controles aduaneros, todavía persiste. Se trata de la declaración que realizan los importadores de cantidades que no guardan relación con el peso. Así, según Díaz, mientras hay importadores que declaran, por ejemplo, USD 60 por kilogramo, otros lo hacen en USD 5. “Aplaudimos la acción de las autoridades, pero tienen que ser más exigentes y continuos en su labor. Estamos hablando de verdaderas bandas dedicadas a este muy lucrativo negocio ilegal”.
Jorge N., comerciante de ropa, cuenta a grandes rasgos su ‘modus operandi’. Él, o un integrante de su familia, viaja cada dos meses a un lugar distinto fuera del país (Panamá, EE.UU., Colombia…), donde hay saldos en grandes almacenes de ropa. “Se pueden conseguir prendas desde USD 1 en adelante. La ropa se comprime fácilmente y eso facilita el traslado. Así que por cada USD 1 000 que compro puedo fácilmente triplicar la ganancia. No hay que hacerlo muy seguido o hay que variar las personas por los controles aduaneros”.
Esto es lo que se llama contrabando ‘hormiga’, es decir, de aquellas personas que arriban al país cargadas con varias maletas de ropa, que luego las comercializan entre sus conocidos y hasta en almacenes.
Esto último activó la alerta en el Servicio de Rentas Internas (SRI), por lo que ha incrementado los controles en establecimientos. Pese a ello, las incautaciones aún son mínimas respecto de lo que se sospecha.
“Creemos que al menos es unas 10 veces más lo que circula en el mercado de ropa contrabandeada”, añade Díaz, mientras demuestra con cifras su hipótesis. En el 2008, el Ecuador importó 24 000 toneladas de ropa, año récord. Luego vino la crisis y se impuso una salvaguardia. Las importaciones cayeron a 2 400 toneladas. Pero la demanda continuó.
Hoy, las importaciones suman unas 10 000 toneladas, por lo que hay un hueco de 14 000 toneladas. ¿Quién cubrió eso? Los industriales ecuatorianos no tienen la capacidad para cubrirla; acaso unas 7 000 toneladas. Y, ¿el resto? Se presume que es contrabando.
Control a compras por Web
Los voceros del Servicio Nacional de Aduana del Ecuador (Senae) aclararon el por qué sigue ingresando mercadería ilegal por las fronteras del país.
“Porque el contrabando y la defraudación aduanera es una actividad delictiva impulsada por bandas organizadas que se resisten a dejar estas actividades pese a los controles que realiza el Estado, al igual que pasa con el narcotráfico, el lavado de activos, el robo y demás actividades de este tipo”.
Por ello, el ministro de Industrias, Ramiro González, anunció que como una medida de control se revisará el sistema 4×4, porque se ha prostituido y muchas personas aprovechan esta herramienta para importar ropa a través de compras por Internet, y comercializarlas internamente a precios que afectan al mercado y a los productores nacionales. “Esto ya no está funcionando. Por eso vamos a analizarlo”. dijo.
En contexto
En los cuatro primeros meses de este año, los controles aduaneros han arrojado USD 2,03 millones en mercadería ilegal incautada. La Aduana efectúa tres controles en puertos, aeropuertos, fronteras, barcos pesqueros, camiones, buses de pasajeros, etc.