El gobernador del Banco Central israelí, Stanley Fischer, anunció oficialmente su candidatura para ocupar el cargo de director gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), como sucesor de Dominique Strauss-Kahn.
Sin embargo, las probabilidades de Fischer contra la ministra francesa de Finanzas, Christine Lagarde; y el gobernador del Banco Central de México, Agustín Carstens, son consideradas escasas por algunos analistas.
Uno de los problemas de la candidatura es la edad de Fischer: 67 años. Según los estatutos del organismo, los candidatos, que tienen más de 65 años, son rechazados, por lo que la cúpula debatirá en poco tiempo esta postulación.
Fischer nació el 15 de octubre de 1943 en Rhodesia del Norte (actualmente Zambia) y estudió en Gran Bretaña antes de tomar la nacionalidad estadounidense.
Ratificado en marzo para un segundo mandato de cinco años como gobernador del Banco de Israel, Fisher puede jactarse de haber permitido que ese país atravesara sin mayores daños la crisis económica internacional.
Israel espera un crecimiento de 5% en el 2011 y cuenta con un colchón de reservas de divisas de USD 77 400 millones, que Fisher contribuyó a crear para frenar el alza del shekel y, por lo tanto, promover las exportaciones.
Fischer trabajó de 1988 a 1990 como vicepresidente y economista jefe del Banco Mundial, antes de convertirse en primer subdirector gerente del FMI, de 1994 a 2001. Trabajó luego en el sector privado, siendo nombrado Director Adjunto del Citigroup y Presidente de Citigroup Internacional, grupo bancario en el que trabajó del 2002 al 2005.
La revista Euromoney lo clasificó el año pasado para el primer lugar de su palmarés de los gobernadores de los bancos centrales del mundo. Esta revista ha elogiado especialmente su “visión”. Fue, en efecto, el primer gobernador de los países industrializados que subió las tasas de interés, en septiembre del 2009.
La revista Global Finance también ha elogiado a Fischer, otorgándole la nota “A” en el 2009 y 2010 en su clasificación de los gobernadores de bancos centrales.
Por su parte, Lagarde es la favorita a convertirse en la próxima Directora del FMI. La francesa cuenta con al menos el voto en bloque de los europeos, que no tardaron en cerrar filas en torno a la candidata gala y que dominan un tercio de las cuotas de voto. La cúpula del FMI deberá tomar una decisión hasta el 30 de junio.
El puesto del organismo fue dejado vacante de forma inesperada por el francés Dominique Strauss-Kahn, quien está a espera de juicio por un presunto intento de violación en Nueva York.