El precio del kilo de caucho se incrementó este año a USD 0,85. El año pasado estuvo en 0,20.
Esto ha motivado a sembrar más plantaciones, aunque no se sabe cuántas hectáreas nuevas se han creado. El caucho o látex se extrae del árbol, haciendo una cortadura en el tronco.
Sin embargo, el precio es volátil. Por ejemplo, en julio de 2008 el kilo estuvo en USD 3. Fue el mejor precio de los últimos 10 años, según Luis Ballesteros, representante de la compañía exportadora de caucho Procaesa.
Pero a fines del mismo año bajó a 1,10; al año siguiente bajó más y ahora nuevamente subió.
Esto motiva al productor Fernando Rosero, en Santo Domingo. Tiene 40 hectáreas, de las que 22 están en producción en el recinto Paradero del Toachi.
Rosero dice que los costos de producción por kilo de caucho en las fincas suman USD 0,45.
Según un estudio elaborado por Diego Torres, un especialista en este cultivo, en Ecuador están sembradas 4 942,62 hectáreas. Esa superficie se ha mantenido en los últimos cinco años.
La producción anual es de 4 570, 44 toneladas: 31% se vende en látex y lo demás en caucho seco de chipas, dice Torres.
La empresa Agicom capta la mayor parte, con el 32,05%. Procaesa, Indecaucho y otras industrias también compran.
La producción actual no alcanza para satisfacer la demandas de las industrias que se dedican a la fabricación de llantas, principalmente, y otros productos.
El déficit es de 8 160 toneladas de caucho seco. Según Torres, se necesitan sembrar 7 884 hectáreas para cubrir la demanda.
Torres cree que hay que incentivar a los agricultores a sembrar esta planta y a establecer nuevas plantaciones en sitios adecuados como las provincias de Los Ríos, Guayas y Manabí.
Rosero explica que el 95% de los sembríos en Ecuador está en zonas no aptas, por el exceso de lluvia. Este árbol produce muy bien en zonas sin muchas lluvias. Otro problema es que la inversión se empieza a recuperar a los siete años. La producción comienza a los tres o cuatro años, conforme el manejo que se haga del cultivo.
Por el clima, el promedio de producción por hectárea es de 1 035,44 kilos de caucho seco. Ese rango se tuvo durante 2008. Este promedio podría ser mejor si los bosques estuvieran en zonas menos húmedas, dice Torres.
Para conseguir más producción también es necesaria la introducción de nuevos clones que permitan garantizar el desarrollo y producción de caucho.
Además, las plantaciones que se encuentran en zonas húmedas como Pichincha, Esmeraldas y Santo Domingo están afectadas por el hongo Microcyclus ulei en la hojas. “Esto afecta directamente a su desarrollo y producción”.