El Departamento de Comercio de Estados Unidos envió la tarde de ayer su informe al Ejecutivo en el cual recomienda que no se suspendan las preferencias arancelarias para Ecuador hasta el 31 de diciembre de este año.
Ayer venció el plazo para que el Departamento de Comercio se pronunciara sobre el tema. Se prevé que el gobierno de Barack Obama se pronuncie este mes.
El informe de 56 páginas pone en escena los puntos de vista de adversarios y defensores de las preferencias para Perú, Colombia y Ecuador, además de incluir cifras de la balanza comercial.
Allí se señala que las importaciones estadounidenses desde Ecuador totalizaron USD 5 200 millones en el 2009, un 42% de decrecimiento en comparación con el 2008. Las cifras del Banco Central del Ecuador señalan que la caída fue del 30%.
En el informe también se dice que la salud laboral y derechos a los trabajadores son respetables en el país, el cual continúa colaborando con Estados Unidos en la lucha contra el narcotráfico.
“Esta revisión podía haber recomendado que se suspendan esas preferencias , pero más bien se insiste en la continuación”, dijo el embajador del Ecuador en Washington, Luis Gallegos.
A partir de enero del 2011, otra será la historia, pues el Congreso estadounidense deberá decidir nuevamente si amplía o no esas preferencias.
A finales de este año, Ecuador tendrá que cabildear nuevamente por una prórroga de las preferencias. El objetivo del Gobierno ecuatoriano es que se amplíen, al menos por cuatro años, mientras se define un acuerdo comercial de largo plazo.
Pero la ampliación de esas preferencias tiene detractores. Una de las empresas que más ha hecho visibles sus objeciones es Chevron-Texaco, que en mayo pasado envió su informe enumerando la lista de razones por las que Ecuador no puede seguir siendo beneficiario de las preferencias arancelarias, entre ellas la falta de seguridad jurídica en los contratos petroleros.
En esa misma línea de oposición está la Cámara de Comercio Americana y cinco industrias manufactureras. La empresa atunera Bumble Bee puso una objeción a la importación de atún ecuatoriano bajo la ley de preferencias arancelarias.
Gallegos señaló que la Embajada ecuatoriana en Washington está analizando la objeción de Bumble Bee. “Obviamente vamos a dar nuestras explicaciones y las razones de la importancia que tiene el atún y los otros productos que están dentro de la lista de preferencias arancelarias, por el impacto positivo en lo social y laboral para Ecuador”.