La Fiscalía General del Estado abrió una indagación previa a las compañías Seguros Sucre y Seguros Rocafuerte, debido a una denuncia del asambleísta Galo Lara sobre supuestas anomalías en la contratación de reaseguros.
El fiscal Galo Chiriboga, en su disposición del pasado 7 de septiembre, abrió el caso para investigar el cometimiento de un presunto delito y sus responsables. Esto, sin embargo, no significa una inculpación directa a las dos compañías, sino que se encuentran en una etapa de verificación de dicha denuncia y, por consiguiente, de su defensa.
En este escenario, la Fiscalía abrió dos frentes para ejecutar su trabajo. El primero se enfocará en la contratación de la reaseguradora Costwold Insurance Limited, por parte de ambas aseguradoras, a pesar de que supuestamente no se encontraba registrada legalmente ni acreditada para desarrollar actividades en el país.
La segunda arista, en cambio, profundizará sobre un presunto delito de lavado de activos, como resultado de los movimientos y transacciones derivadas de los contratos de las dos aseguradoras con dicha reaseguradora.
Este último proceso se reabre, a pesar de que la Fiscalía lo desestimó el año pasado tras haberse probado la legalidad de la contratación y por los resultados de una pericia. Pero Lara impugnó la decisión fiscal de archivar la causa porque presume que “los funcionarios judiciales que intervinieron en el proceso habrían aceptado y hecho uso doloso de los documentos”.
Según Lara, Seguros Sucre otorgó el 31 de diciembre del 2008 un contrato de reaseguro a Costwold para amparar todos los negocios relacionados con el Seguro Obligatorio de Accidentes de Tránsito (SOAT). Mientras que Seguros Rocafuerte hizo lo propio con el objetivo de cubrir los riesgos de una póliza de incendios y líneas aliadas.
Este Diario pidió un pronunciamiento de las aseguradoras, pero aún no tiene respuesta.