Los 140 ex trabajadores de Ícaro, que está en proceso de liquidación, recibirán su dinero desde la próxima semana. Así lo anunciaron ayer las autoridades aeronáuticas y el liquidador de la compañía, Sebastián Valle.
Parte del pago se realizará con el dinero que ha recaudado el Servicio de Rentas Internas por retenciones de crédito de ciertas compañías que le debían a Ícaro.
Esteban Saltos, hijo del accionista de Ícaro, Guido Salto, dijo que después de que la firma tuvo tres liquidadores ya era hora que se haga algo por los ex empleados”.
En cambio, la deuda que tiene Ícaro con los pasajeros que compraron sus boletos, cuando la aerolínea no operaba, asciende a unos USD 40 000. Para ellos la devolución será paulatina, pero no hay una fecha definida. Para cubrir esos valores se embargarán los bienes de la firma, por ejemplo, un avión que tiene en Manta.