Entrevista a Jaime del Arenal. Embajador de México en Ecuador
¿Por qué las firmas mexicanas invierten en Ecuador, si permanentemente se habla de inseguridad jurídica en el país?
En México no hay esa visión. Es un poquito de sentido común. Si un empresario sabe que su inversión no es segura, pues no invierte. Por eso he dicho desde el inicio que esto se basa en la confianza que se tiene en Ecuador.
¿Cuál es la visión de las empresas mexicanas sobre el país?
Hay empresas que están sumamente satisfechas con los resultados y el tratamiento administrativo. Habrá gente que, tal vez, tendrá que arreglar algún problema muy puntual. Dificultades, en cualquier parte del mundo, existen. Pero en términos generales las inversiones mexicanas han fluido.
Los USD 5 400 millones de inversión mexicana se refieren a operaciones directas o son capitales en compañías del país?
De todo. El estudio que se hizo para determinar la inversión en Ecuador incluyó inversión directa, inversiones en asociación con empresas ecuatorianas o en otras que no aparecen como procedentes de México, pero sabemos que el capital viene justamente del país.
¿A corto plazo, hay alguna empresa que vaya a asentarse en el país?
Hay una firma que se llama Fondo de Cultura Económica, del Estado mexicano, a cargo de la parte editorial (…) queremos este año abrir (…). Se espera otra inversión del Tecnológico de Monterrey.
Y, a futuro, ¿hay interés de otras empresas?
Tenemos noticias de posibilidades de inversión en el sector de la madera y de productos alimenticios como el pan. Otras están en la búsqueda y exploración de yacimientos, etc.
Si se negocia un acuerdo comercial, ¿se espera incluir un mecanismo de protección de inversiones de las partes?
Se tienen que establecer los mecanismos que aseguren la confianza del inversionista y las normas de los Estados.
¿Qué tipo de convenio se busca?
Se busca un acuerdo comercial, no de Libre Comercio. En eso, ambos gobiernos han sido muy claros. La relación comercial de ambos países se ha fundamentado en el Acuerdo Parcial 29, que se ha ratificado y renovado, aunque no últimamente. Se busca un marco normativo más seguro.