Mecánicas, vulcanizadoras y otros locales abrieron este jueves 2 de abril del 2020, en Quito. Foto: Eduardo Terán / EL COMERCIO
Algunos locales que deben permanecer cerrados por la emergencia sanitaria del covid-19 comienzan a atender al público en diferentes sectores del sur de Quito. A la par también se incrementaron las ventas informales de alimentos, guantes y mascarillas en esas zonas.
La mañana de este jueves 2 de abril del 2020, este Diario recorrió varios puntos y constató que al menos 10 locales abrieron sus puertas. En La Argelia, por ejemplo, un taller de reparación de lavadoras atendió con normalidad.
Lo mismo pasó con vulcanizadoras y mecánicas de motocicletas en La Ferroviaria. A la altura del Camal, el trabajador de una mecánica pintaba con soplete un vehículo frente a la gente que ingresaba al centro de abastos para hacer compras. De forma simultánea, comerciantes autónomos montaron sus puestos de verduras y frutas en la vereda; la gente se les acercaba a comprar. Extranjeros vendían cigarrillos en las calles.
En Santa Rita se abrió un almacén que vende repuestos automotrices y mangueras. Al frente, los empleados de una peluquería trabajaron con normalidad. Los clientes ingresaban al local y cerraban la puerta. En la avenida Mariscal Sucre, un establecimiento que comercializa pinturas hizo lo mismo. En la Maldonado, los empleados de una mecánica reparaban los vehículos y se los alcanzaba a ver desde la calle.
Desde la Intendencia de Pichincha se informó que se realizan controles permanentes en los barrios para evitar que se abran negocios que no comercializan productos de primera necesidad. Hasta ayer miércoles 1 de abril, 21 fueron clausurados.
El Gobierno dispuso el cierre de los servicios públicos, a excepción de salud, seguridad, servicios de riesgos y aquellos que, por emergencia, los ministerios decidan mantener abiertos. Pueden funcionar las industrias agrícolas, ganadera y de cuidado de animales, las cadenas y actividades comerciales de las áreas de alimentación, de salud, las encargadas de los servicios básicos y toda la cadena de exportaciones.
Las tiendas de barrios, los mercados y supermercados deben permanecer abiertos. Los bancos y servicios operan normalmente. Las grandes cadenas de productos y salud garantizan la producción de bienes y servicios a domicilio a través de las diferentes plataformas digitales que trabajan las 24 horas, los siete días a la semana. El resto de actividades de sectores y de industrias están detenidos.
Estefanía Grunauer, supervisora de la Agencia Metropolitana de Control, indicó que los operativos que realiza la entidad son permanentes en toda la ciudad, y que el personal ha constatado que entre el 85 y el 90 % de los locales acatan las medidas de restricción.
Sin embargo, hay zonas especialmente en el sur donde aún se observan aglomeraciones, y locales no autorizados que están abriendo sus puertas.
Recordó que desde el 16 de marzo del 2020, como un mecanismo para evitar aglomeraciones y focos de infección, el alcalde Jorge Yunda emitió una resolución para suspender temporalmente todas las actividades económicas del Distrito, exceptuando las relacionadas al tema de expendio de alimentos, venta de medicinas, sectores estratégicos, las vinculadas al sector médico, y las previstas por el decreto estatal.
Hasta el momento, 57 locales han sido clausurados por no cumplir esas disposiciones.
La AMC tiene un promedio de 300 funcionarios en las calles y se encargan del procedimiento sancionador.
Hasta el día de hoy, se han realizado 380 operativos en coordinación con las Fuerzas Armadas, Policía Nacional, Cuerpo Metropolitano de Control.
Asimismo han participado en 125 operativos en mercados, y 60 en los ingresos de la ciudad.