El Mercurio de Chile,
GDA
El intento de asesinato a Adolf Hitler casi se transformó en un holocausto para su familia. Sebastian von Stauffenberg es sobrino del famoso coronel alemán que quiso asesinar al ‘Fuhrer’, en 1944. El mismo que fue interpretado por Tom Cruise en la película Operación Valkiria.
Von Stauffenberg tiene 70 años. En el momento del atentado, el 20 de julio de 1944, tenía cuatro.El ataque de su tío a Hitler pudo sellar el destino de su familia. “Los adultos fueron trasladados a campos de concentración o a cárceles, poco después del atentado. Los menores fuimos educados por nodrizas nacional socialistas. La idea era que nos convirtamos en súbditos de Hitler”.
Desde agosto de 1944 hasta marzo de 1945, cuando Alemania se rendía a los aliados, Sebastian y sus hermanos menores vivieron en el castillo de su abuelo: Wilflingen, en la región de Wurttemberg. El castillo estaba tomado por el gobierno de Vichy, franceses que se hicieron cómplices de los alemanes durante la guerra.
Hacia finales de la guerra, gran parte de la cúpula nazi quería salvar su vida, lo que benefició al clan Von Stauffenberg. Himmler, ministro del Interior de Hitler, los envió desde los campos de concentración hasta los Alpes, en el norte italiano.
La idea de Himmler era cambiar a gente prominente con los rusos. Pero dentro del caos el bus quedó atascado en una congestión. Uno de ellos vio a un soldado amigo. Él les advirtió que eran rehenes de las SS, lo que hizo que las 25 personas del clan Von Stauffenberg fueran liberadas.
Von Stauffenberg se acuerda con claridad del día en que llegaron las tropas aliadas al castillo de su abuelo (marzo, 1945). “Eran tropas coloniales, los oficiales eran franceses, pero los soldados eran algerianos o marroquíes, antiguas colonias francesas. Tenían otros códigos de guerra. Se les daba un día a la semana para saquear casas e incluso violar mujeres. Por suerte, buena parte de mi familia volvió al castillo días después de la llegada de las tropas. Y mi abuelo, que hablaba francés, negoció para que pudiéramos quedarnos en la iglesia con soldados apostados afuera. El resto del pueblo estaba abierto para el saqueo”.
Von Stauffenberg está seguro de que su destino habría sido otro si Alemania no hubiera estado perdiendo la guerra. Hitler ya estaba sitiado en Berlín. Los generales estaban preocupados de salvar sus vidas. Asesinar al clan Von Stauffenberg, una familia de estirpe noble, no ayudaría a limpiar su ya manchada imagen.
A pesar de que habían salvado sus vidas, el clima político seguía siendo difícil para el clan. Nina Freiin von Lerchenfeld, la viuda de Claus, no pudo cobrar la pensión de su marido hasta 1953. Para muchos, los Von Stauffenberg eran traidores, y ese era el argumento que se le daba a la viuda para negarle la pensión militar.
“El 90 por ciento de Alemania era nazi. Cuando se perdió la guerra, muchos siguieron siendo nazis y en el gobierno, porque eran empleados capaces”, dice.
En los años 50 se revertió la percepción que había del clan. Ayudó Konrad Adenauer, canciller germano, que también estuvo involucrado en el atentado a Hitler, pagando con cárcel. Adenauer se dio cuenta de que Von Stauffenberg debía ser ensalzado como héroe de la resistencia y como defensor de los nuevos ideales democráticos del país.
La calle del edificio donde fue ejecutado Von Stauffenberg fue rebautizada como Stauffenbergstrasse. El edificio es el cuartel militar de Benderblock, lugar donde ahora cada 20 de julio los alemanes depositan cientos de flores en honor a él.