Un submarino norcoreano hundió el 26 de marzo la corbeta de Corea del Sur “Cheonan” en una zona en disputa en el Mar Amarillo. Así lo reveló un informe publicado ayer, el cual desató desmentidos, condenas, amenazas de guerra del Norte, y un llamado de China a la “moderación de todas las partes”.“Las pruebas llevan a concluir de manera abrumadora que un torpedo fue disparado por un submarino norcoreano”, indicó el equipo de investigadores internacionales en su informe. “No hay otra explicación posible”, señalaron, precisando que la explosión que partió al buque en dos fue provocada por un torpedo norcoreano de 250 kg.El hundimiento de la corbeta surcoreana, de 1 200 toneladas de desplazamiento, cerca de la frontera marítima con Corea del Norte, provocó la muerte de 46 marineros surcoreanos. Corea del Norte calificó inmediatamente como “inventos” las conclusiones de los investigadores, según la agencia Yonhap. “Tomaremos medidas enérgicas, entre ellas una guerra general, si se aplican sanciones a Corea del Norte”, advirtió la Comisión de Defensa Nacional (NDC), el órgano más poderoso del régimen comunista norcoreano, presidido por el líder Kim Jong-Il. Iguales medidas enérgicas, pero esta vez contra Corea del Norte, prometió el presidente surcoreano Lee Myung-Bak luego de la publicación del informe. En conversación telefónica con el primer ministro australiano Kevin Rudd Lee indicó que “medidas enérgicas serán adoptadas contra Corea del Norte”, según un comunicado dado a conocer por el gabinete presidencial. Gracias a una fuerte cooperación internacional, Corea del Sur “deberá hacer que Corea del Norte reconozca su mala acción y que vuelva a ser un miembro responsable de la comunidad internacional”, agregó. “Esto fue una seria provocación. Definitivamente habrá consecuencias”, expresó a su vez el portavoz del departamento de Estado de EE.UU., Philip Crowley. Estados Unidos “condena enérgicamente el acto de agresión”, declaró por su parte el vocero de la Casa Blanca, Robert Gibbs. El vocero indicó que el informe emitido por un equipo multinacional que investigó el siniestro del 26 de marzo, reflejó un “estudio objetivo y científico de la evidencia”. El primer ministro japonés, Yukio Hatoyama, juzgó “imperdonable” el gesto de Corea del Norte. Asimismo el secretario de la ONU, Ban Ki-moon calificó el informe que acusa a Corea del Norte como “profundamente inquietantes”. China también llamó a la moderación de todas las partes luego de la acusación contra Corea del Norte de la cual es uno de los escasos aliados que tiene.