Un estudiante murió y otros 150 resultaron heridos el domingo, 12 de abril de 2015, en un campus universitario en Kenia, en la huida posterior a la explosión fortuita de un cable eléctrico que hizo temer un nuevo ataque islamista, indicó a la AFP el vicepresidente de la universidad de Nairobi.
“Un cable eléctrico explotó en el exterior de la residencia universitaria (…) los estudiantes creyeron que habÃa un ataque”, diez dÃas después del perpetrado por un comando islamista contra la universidad de Garissa, indicó Peter Mbithi.
Varios estudiantes se tiraron por la ventana de sus cuartos, algunos desde el quinto piso, y uno de ellos murió, explicó.
“También hubo una estampida”, añadió el responsable, precisando que en torno a 150 estudiantes habÃan resultado heridos al saltar al vacÃo o bien durante la avalancha.
Según el ministro de Educación, Jacob Kaimenyi, la explosión se produjo a las 04:00, en el campus Kikuyu, dependiente de la universidad de Nairobi y situado a unos 20 kilómetros al oeste de la capital, cuando los estudiantes dormÃan.
Entre los heridos, 20 siguen hospitalizados, pero “la mayorÃa tiene heridas leves y han podido salir del hospital”, afirmó el responsable universitario.
El 2 de abril, un comando islamista atacó al alba la universidad de Garissa, en el este de Kenia, entrando en los edificios de la residencia universitaria y matando a 148 personas, de las cuales 142 eran estudiantes.
Los islamistas somalÃes shebab, que han multiplicado los ataques mortales en Kenia desde que el ejército keniano hace incursiones en Somalia para combatirlos, reivindicó el ataque y amenazó a Kenia con una “larga y aterradora guerra”, asà como con “nuevos baños de sangre”.