Un día de nacido tenía el hijo de Mauricio Ronquillo y Tamara Franco, cuando el 9 de julio fue trasladado del Hospital Federico Bolaños Moreira del IESS, en Milagro, al Hospital del IESS, Teodoro Maldonado, en Guayaquil, por problemas respiratorios.
“Cuando lo trasladaron yo veía que el niño se movía demasiado, lloraba y sudaba”, cuenta Ronquillo.
El infante habría sido trasladado en una termocuna con fallas, por lo que los dos médicos cubanos y una enfermera ahora acusados de presunto homicidio culposo, “colocaron guantes quirúrgicos llenos de agua caliente en la parte baja de la cuna”, contó el padre.
El menor habría fallecido por quemaduras en el 20% de su cuerpo.
Ayer, 20 de julio, se realizó la audiencia de formulación de cargos en Guayaquil.
El juez de Garantías Penales del Guayas, Juan Vizuete, no acogió el pedido de la Fiscalía de prisión preventiva, sino que dispuso el arresto domiciliario, la prohibición de salida del país y la presentación cada tres días ante la Fiscalía para los médicos Mario C. y Ana C. y la enfermera Eunice G.
Joselito Argüello, abogado defensor de la enfermera, indicó que Eunice G. solo cumplía órdenes de sus superiores.
La instrucción fiscal durará 90 días, tiempo en el que la Fiscalía investigará el caso.
El delito de homicidio culposo por mala práctica profesional está tipificado en el artículo 146 del Código Orgánico Integral Penal (COIP) y establece una pena privativa de libertad de uno a cinco años.