Mauricio Rodas: ‘Gobierno y Municipio deben dialogar sobre los pasajes’

Entrevista con el alcalde de Quito, Mauricio Rodas, por sus 100 días en la alcaldía. Foto: María Isabel Valarezo / EL COMERCIO

Entrevista con el alcalde de Quito, Mauricio Rodas, por sus 100 días en la alcaldía. Foto: María Isabel Valarezo / EL COMERCIO

Entrevista con el alcalde de Quito, Mauricio Rodas, por sus 100 días en la alcaldía. Foto: María Isabel Valarezo / EL COMERCIO

Entrevista a Mauricio Rodas, alcalde de Quito por sus 100 días en la alcaldía.

Cien días es lo que un político ecuatoriano suele tener de luna de miel. ¿Se cierra esa etapa en su gestión?

Ha sido una etapa inicial muy intensa. Recibimos una ciudad con enormes problemas que, ya en funciones, palpamos que eran mucho más graves de lo que se nos dijo en la transición. Había un total divorcio entre la administración central y las empresas públicas metropolitanas en todos los temas.

¿Es el primer diagnóstico?

Encontramos un personal desmotivado, que comenta permanentemente el irrespeto que sufrió durante los últimos años. Desde el primer día, me dediqué a visitar uno a uno a todos los funcionarios municipales, en las diferentes dependencias, recorriendo sus escritorios y muchísimos de ellos se sorprendían al verme ahí.

Eso es algo que se hace al principio de una gestión. ¿Le será fácil sostener este tipo de liderazgo?

De lo que me decía el personal, esta era la primera vez que un Alcalde iba a sus escritorios. En estos 100 días he buscado una gestión transparente, eficiente y cálida. Hemos empezado a reducir el aparato burocrático en el Municipio, partiendo de nuestro compromiso de respetar la estabilidad laboral de los funcionarios de carrera. Tenemos 500 empleados más de libre remoción y 2 500 temporales. Desde allí se puede iniciar la reducción, y evitando más contrataciones.

¿Cuánta gente se va a ir?

Estamos evaluando y no tengo una cifra. Por ejemplo, a medida que esos 2 500 contratos venzan, no los renovaremos.

¿Gente de Augusto Barrera?

En su administración se incrementó significativamente el personal, sobre todo aquellos por contratos provisionales.

¿Usted está sacando a la gente de Alianza País?

Se está reduciendo el aparato burocrático para destinar más recursos para los quiteños. Además mi compromiso es tener personal técnico en el Municipio y no político.

Esta semana los transportistas le pidieron subir los pasajes. ¿Cómo lo ve Ud?

Recibimos la propuesta del sector y la vamos a revisar con detenimiento para iniciar un proceso de diálogo. Yo soy una persona con total apertura, y dialogaremos en la necesidad de construir acuerdos que beneficien a los diferentes sectores de la ciudad. Los criterios de los transportistas son legítimos, pero también hay que cuidar los bolsillos de los quiteños.

¿El pasaje no ha subido en 11 años, le corresponde a un Alcalde asumir el desgaste de un ajuste por una decisión de los presidentes?

Debe ser un tema que se aborde entre autoridades nacionales y municipales.

¿En ese diálogo debe estar el Gobierno?

Sería importante que el Gobierno participe y exponga su punto de vista respecto a cómo su política de subsidios a los combustibles influye en este tema y en la definición tarifaria.

¿La solución al transporte va a ser su principal desafío?

Es un tema fundamental. Y hemos dado muestras efectivas de lo que se puede hacer. Con eficiencia, en tres semanas, reincorporamos las unidades de transporte que por desidia estaban fuera de servicio más de cuatro años. Recuperamos ese crédito de USD 15 millones que la Alcaldía anterior devolvió de forma incomprensible. En la emergencia hicimos un concurso eficiente y transparente para licitar nuevas unidades.

¿Este es su tema central?

Hay mucho otros. Para mí, lo más importante es mejorar la calidad de vida de la gente.

¿Esa negociación se tiene que dar ya, hasta finales de año, por poner un plazo?

Yo no quiero imponer plazos, pero debe resolverse pronto.

¿Cómo va la relación con el Gobierno central?

Dijimos que íbamos a mantener una relación de cooperación y coordinación con el Gobierno nacional y con todas las autoridades del Estado, incluyendo las locales. Eso es lo que hemos hecho. Estoy abierto a un diálogo con el Presidente sobre proyectos que beneficien a Quito. Yo soy un convencido de que es hora de impulsar una nueva forma de hacer política. Eso es lo que representa nuestro proyecto. Estoy convencido de que uno debe sentarse a dialogar con todos, y que eso de ninguna manera implica renunciar a principios, a valores, o cambiar la forma de pensar. Por el contrario, creo que la capacidad de diálogo por diferentes actores, más allá de sus diferencias, es el reflejo de una democracia que va madurando. Hacia allá debe ir el Ecuador, siendo congruente con ese mensaje y esa postura, que siempre hemos tenido, es que así como yo me he sentado a conversar con el Presidente de temas de interés para Quito, también me he sentado a dialogar con autoridades de diferentes ideas políticas. Con el alcalde, Marcelo Cabrera, de Cuenca, con el alcalde, Jaime Nebot, de Guayaquil y me seguiré reuniendo con diferentes alcaldes y prefectos de todo el país, más allá de las banderas políticas, porque creo que es hora de que los actores ejerzamos esa democracia madura basada en el diálogo y en la capacidad de construir acuerdos que beneficien a los ciudadanos.

¿Quedó satisfecho con el apoyo del Gobierno en esta crisis de los sismos?

Fue un ejemplo de un trabajo positivo. Vamos a promover esa línea de cooperación que tiene que ser respetuosa.

El Gobierno estuvo presente en la crisis, pero el presidente Rafael Correa llegó a Quito luego de varios días.

No quiero evaluar ese tipo de cosas, para mí lo de fondo es el resultado que permitió atender de forma efectiva la emergencia. Esta puso a prueba la capacidad de liderazgo de las nuevas autoridades municipales.

¿Cuál fue el aporte concreto que dio el Gobierno?

Coordinación, el apoyo de la Policía, del Ejercito, algo muy importante. También, que de alguna manera zanjó la duda que se generó en torno a las competencias, discusión en la cual, insisto, no entramos, porque no nos parecía oportuno.

¿Le llamó la atención que la Senplades participara durante la emergencia?

Me llamó la atención esa discusión sobre el ámbito de competencias cuando había víctimas mortales y heridos. Donde también hubo colaboración por parte del Gobierno, fue cuando nosotros, en virtud de la declaratoria de emergencia, solicitamos a la Agencia de Regulación y Control Minero (ARCO), que es parte del Ministerio de Recursos Naturales no Renovables, es decir, parte del Gobierno, le solicitamos que intervenga para suspender las labores de las canteras en la zona de riesgo, para precautelar la seguridad de los ciudadanos, y le solicitamos que realice un control efectivo, sobre la minería presuntamente ilegal que existe en el Distrito Metropolitano de Quito. La ARCO respondió favorablemente.

¿El Cabildo no tenía ya las competencias?

La ARCO respondió junto a la Senplades, la Policía y el Ejército, y suspendieron las actividades de las mineras y están realizando controles sobre la minería ilegal. ¿Qué dice eso? ¿Quién tiene la competencia? Ellos, nosotros no lo podíamos hacer. Solicitamos que lo hagan, porque no puedo extra limitarme de mis facultades legales. Esa, todavía, no es mi competencia.

¿Así las canteras estén en el Distrito?

El último paso en el proceso de traspaso de competencias, es traspasarlos efectivamente en un acto formal de la Secretaría Nacional de Competencias, lo cual todavía no ha ocurrido. El Municipio de Quito todavía no tiene esa competencia, cuando la tenga la vamos a hacer efectiva. Las competencias de la minería las tiene todavía el Gobierno central, tal es así, que cuando yo solicito, a la ARCO, que ellos suspendan las labores de las canteras, aceptan y lo hacen.

¿Cuáles son los logros más importantes de su gestión hasta el momento?

Haber reducido multas, en apenas 16 días de haber llegado a la Alcaldía. Creado el programa Empleo Joven, hace una semana. Y está por aprobarse el programa de trabajo digno para nuestros mayores.

En materia de transporte público, lo que nosotros recibimos es un desastre. Tal es así, que tuvimos que declarar la emergencia. De 235 unidades que conforman el sistema de transporte público metropolitano, 58 estaban fuera de servicio, algunas de ellas llevaban cuatro años sin funcionar por daños reparables. Había una desidia, una negligencia terrible en la administración del sistema, tal es así, que tres semanas después de haber declarado el sistema de emergencia, ya reincorporamos 26 unidades. Y cada día se van reincorporando nuevas unidades.

Segundo, el famoso crédito USD 15 millones, que de manera incomprensible la Administración anterior devolvió. Ese crédito los recuperamos y logramos llevar adelante un proceso licitatorio ejemplarmente transparente y competitivo. Porque en los procesos anteriores, que Barrera declaró desiertos, hubo seis o siete participantes, aquí hubo entre 10 y 26 interesados que retiraron las bases. Pese a que hubo la emergencia, y que eso nos permite entregar el proyecto sin miramientos, llamamos a concurso. Producto de ese proceso ya hemos adjudicado y los buses articulados que hemos comprado. La adjudicación se dio por menos del valor del precio referencial. El precio referencial era de USD 13.5 millones, hemos adjudicado a Mercedes Benz, o sea de primera calidad, por USD 12,9 millones. Esos buses van para diferentes corredores y otros 40 buses estarán en la ciudad en los próximos seis meses.

¿Y el control del tránsito?

Hemos realizado un control efectivo de las vías de uso preferencial, eso es más importante de lo que creen, porque antes todo el mundo invadía el carril exclusivo. Hemos aplicado una política de cero tolerancia, hemos sancionado incluso a altos funcionarios públicos. Producto de ese control, hemos reducido el tiempo de traslado del Recreo a La Y en 4 minutos. Dirán 4 minutos no es nada, pero, cuando multiplicas el tiempo de traslado en días, en meses, en años, es muchísimo tiempo y muchísimo dinero que la ciudad se ahorra.

Estamos iniciando el proceso de remodelación de todas las paradas del sistema de transporte público, la primera de ellas es la de la Plaza del Teatro, van a ver ahí la parada tipo de cómo van a quedar. Una remodelación completa, integral. Estamos por contratar los estudios definitivos de la ampliación del Trole a Calderón. Estamos por contratar los estudios de tres Metro Cables en el noroccidente, en la zona de la Pisulí, la Roldós, todo eso. En el centro; San Juan, La Libertad, Toctiuco. Y en el sur oriente, en la zona de las Argelias. Y estamos también por iniciar los estudios para la vía paralela al túnel de Guayasamín.

¿La vialidad?

En cuanto a obras de infraestructura, nosotros recibimos la fase dos de la Ruta Viva, con un 20% de avance. Por cierto, esta fase debió concluirse en febrero. Hoy tiene más del 60%, o sea hemos agilizado significativamente la base de esa obra. El puente del rio Chiche cuando llegamos a la alcaldía todavía tenía una larga vía que recorrer. Se cerró ya de un carril, y está por cerrarse en pocos días el otro. Inauguramos el puente sobre el rio Pita, cuando llegamos tenía el 20%, y ya la entregamos, antes de hora, se preveía que se inaugure el 8 de septiembre. En campaña yo hablaba de ejes de circulación rápida este-oeste, el 15 de septiembre entregamos el primero, el de la Isaac Alveniz, a la altura de la cabecera sur del antiguo aeropuerto. La iniciamos el 1 de junio, en nuestra alcaldía, y ya lleva un 80% de avance.

Las organizaciones de oposición, para fin de año, quizás empiecen a recoger firmas para ir a una consulta popular y frenar la reelección indefinida. Muchos de esos actores han sugerido que el Alcalde de Quito forme parte de ese pedido. ¿Es una invitación complicada?

La transformación que estamos viviendo en Quito tiene que ver con que la ciudad vuelva a tener una voz que sea escuchada y respetada, en el debate de los grandes temas. Yo siempre estaré abierto y dispuesto a representar los valores y principios de los quiteños, como es la democracia y la libertad.

¿Y si eso le lleva a liderar a la oposición?

No se trata de liderar, se trata de mejorar la calidad de vida de los quiteños y contribuir al fortalecimiento de la democracia.

¿Así esto genere tensiones en la cooperación con el Gobierno central?

Hemos sido electos para transformar positivamente la ciudad, y eso no solo tiene que ver con la obra física, sino, para hacer de Quito una ciudad plenamente respetuosa de la democracia, los DD.HH. Cualquier lucha que vaya en esa dirección tendrá nuestro apoyo.

Hoja de vida. 
Nació en Quito en 1975. Desde el 14 de mayo pasado es el Alcalde
de la ciudad. En el 2013 fue candidato a la Presidencia por el movimiento SUMA y fue director de la fundación Ethos con sede en México.

Su punto de vista.
En estos 100 días de gestión, el Alcalde de la capital resalta el trabajo eficiente. Cree que el alza de la tarifa del transporte público debe ser analizada de forma integral entre el Municipio, Gobierno y los transportistas.

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