Entrevista al Gral. José Gallardo, exministro de Defensa. Foto: Archivo / EL COMERCIO
Entrevista al Gral. José Gallardo, exministro de Defensa.
El país vive un momento difícil en la frontera norte. La gente tiene miedo por los secuestros y asesinatos. ¿Qué debe hacer el Gobierno para enfrentar esta amenaza?
Es sumamente difícil manejar una crisis de esta magnitud sin tener una Inteligencia y sin tener información. Es como introducirse en un recinto oscuro, sin luz. Esa luz es la Inteligencia.
Es decir, ¿en el país no existe Inteligencia?
La Inteligencia no fue destruida en este Gobierno sino en el anterior. De manera que el Gobierno debe reconstruir esta Inteligencia militar y policial. Hay que conseguir los medios técnicos más avanzados. Hay que restablecer una red de informantes. Es un proceso muy difícil que no es de la noche a la mañana.
¿Cómo acelerar esta reconstrucción?
Lo importante es tener otras opciones que puedan sustituirla. Por ejemplo, se debe tener una buena observación aérea para detectar desde el aire indicios, gente que se mueve, grupos irregulares. Se necesita recurrir a la tecnología más avanzada.
¿Cómo obtenerla?
El país debe recurrir a aliados internacionales que tengan este tipo de tecnología. Uno de esos es EE.UU. No somos rivales, las dos naciones tienen objetivos comunes: la lucha contra el narcotráfico y grupos subversivos.
¿Qué hacer con el tema de los secuestros? El estado ha dicho que tiene un canal de comunicación con los perpetradores. ¿Tener ese canal fue un acierto o un error?
Mantener los contactos con los secuestradores es necesario, pero se necesita una técnica especial. Es difícil improvisar, pues la amenaza tiene un extenso conocimiento de la selva, tienen infinidad de escondites. De modo que las circunstancias van cambiando constantemente. Además, están resguardados por los narcos. En esas circunstancias a la población no le queda otra cosa que apoyar a los narcoguerrilleros.
¿Qué debe hacer el Gobierno para que la población no les apoye?
Se necesita dos acciones importantes. La primera es un gran esfuerzo de desarrollo en la frontera norte. De esta forma se puede conseguir la adhesión, la simpatía y la colaboración, de buena voluntad, de la población civil. Ellos ahora apoyan a los violentos por temor o porque viven de la misma coca. Y la segunda acción es darle los recursos que no se les ha dado a las Fuerzas Armadas y a la Policía Nacional. Principalmente, para desarrollar la Inteligencia para que puedan actuar con eficacia.
Una de las acciones que ha tomado el presidente, Lenín Moreno ha sido otorgar 10 días para capturar a alias ‘Guacho’. ¿Cómo ve usted esta estrategia del Mandatario?
El Presidente se ha involucrado personalmente. Eso tal vez ha llevado a que emita esos plazos. Es peligroso dar plazos porque en esta incertidumbre es algo difícil que alguien los cumpla. Ojalá que el Presidente haya tenido información que le hubiese permitido dar estos tiempos.
¿La amenaza es solo en la frontera norte?
El peligro es en todo el país, pero con énfasis en la frontera. Hay que estar atentos.