Redacción Jóvenes
Todo comenzó un domingo por la mañana, en una de esas reuniones de panas. Mientras hablaban Guido, Santiago, Luis y Paúl, fraguaron una idea: diseñar camisetas con sentido de humor.
Lo primerito que se les ocurrió fue el tema de Carnaval. Como dos de ellos son guarandeños (Guido y Santiago) y a los otros les encanta la tradición, imprimieron en una camiseta lo que se ve en esa fiesta: unos lanzan bombas de agua, huevos, harina; otros pelean, bailan o se chuman; además crearon una caricatura de Dios y el diablo brindando.
“Entre todos pusimos plata y sacamos la primera producción. La idea ‘pegó full’ entre los panas. Era más como una travesura de hacer algo que nos identifique”, dice Luis.
Después de ese primer intento, llamaron a su marca Fictoanizomero. Su logotipo es un insecto porque “queríamos que fuera algo que te pique y te moleste”. Y después ya no solo eran las camisetas, los calzoncillos, los naipes y cuadernos con personajes de la historia.
Uno de sus productos estrella es el naipe para jugar 40. Cada carta tiene su propio diseño: el juez de aguas es un gordito llevando una jarra, los perros tienen la caricatura de un perro…
Las ideas para sus productos aparecen fácil, ellos son diseñadores gráficos y uno es artista plástico. Hagan lo que hagan, todo “tiene un sentido de travesura, la picardía de las cosas, el doble sentido”, explica Paúl.
Cuando sacaron a la venta los calzoncillos, dicen que la gente no se arriesgaba a comprar. “Ya nos metimos con algo muy personal”, añade Paúl. Los estampados de estas prendas son graciosos, en especial el que lleva una cola de un diablo gracioso.
Ellos dicen que con una camiseta se puede expresar muchas cosas. Por eso tienen una que cuestiona la democracia: un estampado de tres borregos.
Su última propuesta son los cuadernos de personajes ecuatorianos. La idea es especular (con humor) en los aspectos que no se conocen de figuras como Rumiñahui, Sucre , entre otros.