Las autoridades venezolanas neutralizaron un presunto grupo que planeaba realizar ataques a servicios públicos para reactivar las protestas contra el Gobierno y afectar las elecciones regionales del 15 de octubre, dijo este martes, 3 de octubre, el vicepresidente Tareck El Aissami.
En conexión a estos planes, la policía detuvo a un hombre supuestamente vinculado al dirigente opositor Leopoldo López, quien cumple una condena en arresto domiciliario, y al piloto rebelde Óscar Pérez, quien secuestró en junio un helicóptero de la policía judicial desde el cual disparó contra la sede del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ).
El vicepresidente agregó que el detenido es acusado de ser uno de los jefes en las protestas en el municipio de Chacao, en el este de Caracas, y que se declaró activista del partido Voluntad Popular, de López. “Querían iniciar a partir del 10 de octubre las guarimbas (protestas).
Tenemos registros de llamadas telefónicas que (el detenido) tiene con Leopoldo López. Para que vea el país el cinismo y la inmoralidad de esta dirigencia decadente, de esos líderes y jefes que promueven la violencia y que luego aparecen frente al mundo diciendo que son perseguidos”, señaló al presentar las evidencias en la televisión oficial.
Las protestas contra el Gobierno comenzaron en abril y terminaron en julio con un saldo de 123 muertos. Se apagaron el 30 de julio, después de la controvertida elección de los 545 miembros de la Asamblea Constituyente, un órgano que se instaló declarando tener poderes plenipotenciarios.
El Aissami dijo que el detenido, a quien calificó como un “operador”de la presunta “célula terrorista”desmantelada, admitió estar involucrado en el presunto plan desestabilizador y ser activista de Voluntad Popular.
Según el vicepresidente, al detenido se le incautaron artefactos explosivos que iban a ser supuestamente usados para atentar contra oficinas de servicios comoelectricidad, agua, combustible y cajeros automáticos.
Afirmó que el plan era entorpecer las elecciones de gobernadores previstas para el 15 de este mes, en las cuales sí participará la oposición. Agregó quetambién tenían previsto atentar contra dirigentes de la oposición y responsabilizar al Gobierno de los hechos.
“Su máximo objetivo es el derrocamiento del Gobierno, retomar la vía del golpismo, así como de la insurrección armada para dar al traste con la Constitución y la paz lograda con la Asamblea Nacional Constituyente”, aseveró. El Aissami aseguró que la elección de la Constituyente devolvió al país la paz después de cuatro meses de protestas y remarcó que el Gobierno está decidido a preservar la tranquilidad.