Buses escolares, furgonetas y taxis rutas cobraron hasta un dólar por las carreras, durante el paro de buses en Quito este viernes 25 de agosto del 2017. Foto: Paúl Rivas/ EL COMERCIO
La paralización del transporte público afectó a los ciudadanos que retornaron desde sus sitios de trabajo en diferentes sectores de la ciudad.
En el sector de El Pintado, por ejemplo, decenas de personas desembarcaban de las unidades de transporte escolar que realizaron recorridos a lo largo de la av. Mariscal Sucre. La mayoría, se mostró inconforme por la medida de hecho que regía desde las 00:00 de hoy y que fue levantada pasadas las 20:00 de este viernes 25 de agosto de 2017.
Vanesa Hidalgo, por ejemplo, tuvo que cumplir una verdadera travesía para ir a su trabajo y volver a su domicilio, ubicado en el sector de Solanda. Ella recordó que en la mañana debió caminar aproximadamente tres kilómetros para abordar una furgoneta a la altura del Colegio Paulo Sexto, en La Magdalena.
Esa unidad la trasladó hasta Miraflores. Luego, tomó otra buseta hasta la av. Mariana de Jesús. Ella contó que las unidades cobran entre USD 0.75 y hasta USD 2 por el servicio. “Es un abuso. Aquí los afectados somos los ciudadanos“, contó.
Luego de su jornada laboral, ella tomó otra furgoneta que la llevó hasta el Fuerte Militar El Pintado. “De aquí voy a esperar otra unidad para regresar a Solanda”, dijo, visiblemente cansada.
Mariuxi Fernández también aguardaba en El Pintado. Ella decidió tomar un taxi con otras tres personas que se dirigían hasta la Mena Dos. “No hay busetas para allá, nos toca ir en taxi”, aseguró. Fernández también dijo que las busetas que se trasladan desde el norte hasta el sur cobran más que la tarifa de bus.
Desde las primeras horas del sábado 26, según anunció el gremio de la transportación, se reanudará el servicio en toda la ciudad.