Madrid, DPA
España llamó hoy a consultas a su embajador en Honduras, Ignacio Rupérez, para mostrar “firmeza” en la condena al golpe de Estado contra el presidente Manuel Zelaya.
El gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero confía en que esta medida contribuya “al restablecimiento de la institucionalidad democrática” en el país latinoamericano, indicó un comunicado del Ministerio de Exteriores español.
El jefe de la diplomacia española, Miguel Ángel Moratinos, pidió el martes a la Unión Europea (UE) que llame a consultas de forma “urgente” a todos los embajadores de los países miembro destacados en Honduras y aseguró que España no dará “ningún tipo de legitimidad a las autoridades provisionales inconstitucionales que tienen ahora los hondureños”.
La llamada a consultas supone una retirada temporal del embajador. Es un instrumento diplomático mediante el que los gobiernos expresan gran rechazo a alguna actuación de otro Estado.
Zapatero, por su parte, ofreció el lunes todo el apoyo de España a la Organización de Estados Americanos (OEA) para restablecer el “principio democrático” en el país latinoamericano, mientras que el Congreso de los Diputados condenó “el golpe de Estado en Honduras”.