Washington. AFP
El Secretario de Defensa de Estados Unidos, Robert Gates, anunció los planes para el nuevo presupuesto de Defensa para el año fiscal 2010, que aún deben ser aprobados por el Congreso.
Dentro de las reducciones que anunció está la cancelación del programa F-22 Raptor, además, de otras propuestas y sugerencias que ya causan protestas sobre todo en los sectores de defensa que se verán afectados.
El avión de combate F-22 nació para ser el sucesor del F-15. Finalmente, entró en servicio en 2005 después de más de 10 años de accidentado progreso.
El objetivo de su desarrollo, que empezó en los años 90, fue crear una nave caza de superioridad aérea que fuera invisible a los radares y que superara con creces la velocidad del sonido. Combinar estas características siempre resultó complejo.
Otro problema era el vuelo de crucero, que suponía incorporar a la aeronave unos motores de gran potencia y, por tanto, de gran consumo, lo que podía limitar su autonomía.
Al final, se lograron superar todos los problemas, pero a costa de crear una nave cuyo precio por unidad alcanzó USD 120 millones. Por eso, el Raptor es considerado el avión de combate más costoso del mundo.
Este alto costo ha estado a punto de matar el proyecto en varias ocasiones. Por este motivo, la Fuerza Aérea de Estados Unidos ha tenido que acudir ante el congreso a defender el proyecto para evitar su cancelación.
El F22 Raptor es un avión de combate de alta maniobrabilidad con tecnología furtiva concebido por Lockheed Martin Aeronautics y Boeing Integrated Defense Systems. Fue diseñado en la era de la Guerra Fría. El primer prototipo (YF-22) voló por primera vez en septiembre de 1990. Debido a las pocas unidades que serán fabricadas (120 frente a las 750 que se tenían pensadas) el valor total por unidad es de USD 360 millones.
Hay que tener en cuenta que este costo incluye los gastos de desarrollo e investigación y por tanto cuantas menos unidades mayor es el coste total, siendo el coste unitario de cada aeronave de USD137 millones.
Uno de sus aspectos más llamativos es el hecho de que el armamento está escamoteado dentro del fuselaje. Esta característica se hizo necesaria para hacer al avión invisible al radar.
Además, tiene la ventaja de que mejora notablemente la aerodinámica de la nave, al eliminar todos los bultos y ángulos que supone el aparataje del armamento, pero tiene el inconveniente de limitar significativamente su capacidad de carga.