Olga Imbaquingo Corresponsal en Nueva York
La Organización Juventud Ecuatoriana, a su manera, hace una minga en Nueva York. Primero juntó sueños compartidos y luego golpeó puertas hasta que el anhelo empezó a tener los primeros resultados.
Los participantes
Los jóvenes que se ganaron las becas desarrollaron un ensayo sobre el principal problema que enfrentan los inmigrantes en Estados Unidos. Más que quejas, los participantes tenían que incluir sus propuestas de solución.
Un panel externo calificó a los ganadores. Por ahora se pidió que especialmente se escojan a los jóvenes que habitan en el área triestatal: Nueva York, Nueva Jersey y Connecticut. Pero próximamente ampliarán las zonas de influencia.El objetivo se cumplió al recibir ayudas económicas (becas), para que chicos ecuatorianos, que viven en EE.UU., sigan sus estudios.
Por ahora son cinco jóvenes, entre ellos José Mangasha, un jornalero de la construcción que estudia una maestría en ciencias administrativas, y que logró aumentar su fondo de estudios en USD 1 000 más. Lo mismo consiguieron Stefani Parada, Juan Carlos Eras, María Cruz y Edwin Quito.
Todos llegaron de Ecuador y en Nueva York o Nueva Jersey estudian ingeniería mecánica, ciencias políticas, justicia criminal…
“Esperamos que sea la primera de muchas becas para ecuatorianos. Yo soy salvadoreña y estoy orgullosa de ser parte de este grupo que tiene sueños para ayudar a su comunidad. Esperamos que este fondo crezca. Gracias por creer en nosotros”, dijo Morena Gutiérrez, quien ahora es la presidenta de Juventud Ecuatoriana.
Carlos Guevara, un ingeniero en tecnología digital, es quien trabaja con los muchachos ecuatorianos. Los capacita a través de talleres para mejorar sus destrezas en el desarrollo de sus pequeños negocios con ayuda de la tecnología digital disponible.
“Este fue un sueño que comenzó hace tres años. Lo concebimos quienes empezamos a estudiar en este país. Fue muy difícil al comienzo, no contábamos con el apoyo de organizaciones para latinos y peor sin documentos”, recordó Guevara. Él, además, motivó a otros que trabajan los fines de semana para ayudar a más ecuatorianos que emigraron sin completar su bachillerato en Ecuador.
Los jóvenes de la organización se convirtieron en profesores. Con la ayuda de los textos oficiales, que tiene el sistema educativo estadounidense, empezaron a dictar clases a sus alumnos. Jornaleros, cajeras y obreros de la construcción se inscribieron para obtener su título de bachilleres.
Esta ONG también ha dictado charlas y conferencias de especialistas que trabajan en el sistema educativo de Nueva York. Dan guías a los estudiantes ecuatorianos y latinos sobre cómo aplicar para becas. En ese recorrido de explorar rutas por dónde navegar en busca de las becas se encontraron con que sí había ayudas económicas para otras nacionalidades. Pero no para ecuatorianos.
“Este es el comienzo”, dijo Guevara, quien recordó que el primer fondo lo obtuvieron con ayuda de Citibank, Mecca Constructing, el seguro de Salud Fidelis y Abitronix, la compañía de venta de tecnologías especializada en comunicación. La tarea es convertirlo en una ceremonia anual de entrega de becas no solo para los ecuatorianos de aquí, sino también de Ecuador. “Es que ver esos rostros con ganas de triunfar hace que cualquier sacrificio esté pagado”. La ocasión fue propicia para reconocer a ciudadanos destacados en EE.UU., que son motivo de inspiración para los jóvenes.
Entre ellos están: la primera juez ecuatoriana en EE.UU., Carmen Velásquez; el abogado Gerardo Mejía; Stephanie Fiallo, experta en motivación profesional y relaciones humanas; y Julio Salinas, un ecuatoriano que solo trajo en los bolsillos el “sueño americano” y ahora dirige la empresa familiar Mecca Contracting Inc.