Unos 300 habitantes del cantón azuayo de Santa Isabel protagonizaron una marcha de respaldo al alcalde, Rodrigo Quezada, en Cuenca.
Ellos pedían respeto a la democracia y exigían que el Banco Central del Ecuador le devuelva las claves de la cuenta del Municipio al Burgomaestre.
Desde hace seis meses, la oposición liderada por la vicealcaldesa, Miriam Guartán, de Alianza País, intentan sacar de la alcaldía a Quezada. Hay varios procesos judiciales interpuestos por las partes, dos administraciones municipales porque según Guartán ella es la nueva alcaldesa y gobierna desde una parroquia, enfrentamientos violentos…
El pasado 27 de octubre, por pedido de la Vicealcaldesa, autoridades de la Gobernación de Azuay enviaron un piquete de policías para intentar sacar a los funcionarios que hacen vigilia en el Municipio, sin ninguna orden judicial.
Hubo destrozo de los ventales del edificio. Asimismo, el Banco Central le quitó las claves al alcalde Quezada acogiendo la supuesta destitución de una mayoría del Concejo Cantonal, presentada por Guartán.
En el inicio de la semana anterior, el Banco Central le devolvió las claves pero el pasado viernes le volvió a suspender. Según Quezada, detrás de esto está el Gobierno que intenta sacarlo del poder porque no comulga su tesis y es oposición en temas claves como la minería en la provincia.
Quezada tenía previsto hoy presentar una demanda contra el presidente del Banco Central, Pedro Delgado y la Gerenta por las inconstitucionales cometidas. Además, prevé solicitar una audiencia en la Asamblea Nacional para informar lo que acontece en este cantón que está paralizado, sin obras y con un pueblo dividido.