El patio de retención vehicular de Las Cuadras, en el sur, tiene capacidad
para 200 automotores. Foto: Alfredo Lagla/ EL COMERCIO.
A 10 meses de asumir todas las competencias de tránsito, en Quito, cuatro patios de retención vehicular resultan pequeños. En estos lugares, donde son trasladados los automotores involucrados en contravenciones o delitos a la Ley de Tránsito, no hay espacio para un vehículo adicional.
Los cuatro terrenos adaptados para cumplir con esta función tienen capacidad para 830 automotores, en total. Pero hasta el mediodía del 1 de junio del 2015 había 839, según datos de la Dirección de Fiscalización de la Agencia Metropolitana de Tránsito (AMT).
En Guamaní, en el sur, en el patio de retención había vehículos corchados, formaban una segunda fila. En Las Cuadras ocurría algo parecido. Las plazas disponibles estaban llenas.
Debido a esta realidad, es complicado hallar un espacio. Luis Paredes, quien presta el servicio de transporte de automotores, comentó que debe esperar la confirmación de los agentes civiles para movilizar los carros. “A veces los patios no están cerca del lugar del accidente o detención”.
Por ejemplo Diego Tinoco, propietario de un carro involucrado en un accidente de tránsito en La Ecuatoriana, llevó el 1 de junio del 2015 su vehículo a Guamaní ubicado a siete kilómetros de distancia, cuando el patio de Las Cuadras estaba a unos tres.
Los automotores que se encuentran dentro de los patios están implicados en supuestos accidentes de tránsito, tienen las llantas lisas, el conductor no contaba con licencia, prestaba un servicio de transporte informal, estaba en estado etílico.
Por estos casos, la mayoría, está cumpliendo un proceso legal. De los 839 carros retenidos en Quito, 831 son parte de litigios, explicó Guillermo Altamirano, director de Fiscalización de la AMT.
Además hay 50 unidades que llevan alrededor de 10 meses; es decir el mismo tiempo de funcionamiento de los patios. Pero no se los puede remover.
Para que uno de estos automotores sea retirado por el propietario se requiere la resolución de un juez de Tránsito, pagar las multas y el parqueadero. Por cada día que permanece un vehículo liviano, los dueños deben cancelar USD 3; 7, por los pesados y 1, las motos.
Mientras se cumple con estos trámites y se libera espacio en estos sitios, la AMT informó que cuenta con 159 plazas provisionales en los patios de retención de mal estacionados e infractores del pico y placa.
Para la próxima semana está previsto habilitar un nuevo patio de retención vehicular en Carapungo, en el norte. Este tendrá 800 plazas. También se hará un acercamiento con la función judicial para solicitar que se agiliten los procesos legales, dijo Altamirano.
Para Juan Francisco Arias, máster en Ingeniería del Transporte, la incorporación de un patio de retención es necesaria, porque el incremento del parque automotor debe de ir de la mano con los servicios relacionados a estos. Además agregó que la gente debe disponer de sitios cercanos y accesibles para facilitar, en parte, el trámite de retiro de los carros.