Redacción Quito
A las 09:30 de ayer el cabo segundo Jorge Cedeño aún no había sancionado a ningún transeúnte. Él vigilaba el tránsito en el sector de La Marín, desde las 06:00. “Muchas personas respetan la Ley de Tránsito pero todavía hay algunas otras que no lo hacen”.
Rosa Chisaguano fue una de ellas. Aunque el semáforo más cercano estaba a menos de 50 metros, ella prefirió esperar un par de minutos para cruzar por medio de la avenida Pichincha.
Tras hacer a un lado las espinas de las plantas colocadas como ornamento en el parterre central, Chisaguano apresuró el paso para cruzar el segundo tramo de la avenida. “Fue para cortar camino”. Ella está consciente del riesgo y asegura que desde que se iniciaron los controles tiene más cuidado al cruzar la calle.
En el mismo sector, Ligia Cali cometió la misma infracción unos minutos después. Ella aún no ha sido sancionada por la Policía y aseguró que, en relación a los primeros días, el control policial ha disminuido. Cedeño admitió que el control hacia los peatones se redujo en los últimos días.
La Dirección Nacional de Tránsito (DNT) ratificó que hay una disminución en el número de operativos enfocados al control de peatones. Esto porque, según la Policía, la prioridad es el control de tránsito en las vías debido a los apagones y el control en espectáculos organizados por las fiestas capitalinas.
Pero no todos necesitan el control de la Policía para respetar la Ley Vial. Victoria Cadena esperó que los autos se detuvieran en el semáforo de la avenida Pichincha, frente a la estación de la Ecovía, para cruzar por el paso cebra.
Ella aseguró que prefiere utilizar los cruces cebra y los semáforos porque muchos conductores no respetan al peatón y para evitar accidentes de tránsito.
Ricardo Palma es otro transeúnte que concuerda con Cadena. Él dijo que aunque era más corto y más rápido cruzar la vía lejos del paso cebra, es más seguro respetar las señales y la Ley.
Una visión distinta tienen algunos peatones que prefieren no hacer uso del puente peatonal frente a la Universidad Católica y cruzan la avenida 12 de Octubre con ayuda de los semáforos. Mario Félix, por ejemplo, asegura que cruzar la 12 de Octubre por el puente quita mucho tiempo. Aunque él está consciente de los riesgos, también dijo que hace falta más control de la Policía hacia los conductores que tampoco respetan a los peatones.
El apuro también le hizo cruzar la calle en medio del tráfico a Nátali Domínguez. Pero Évelyn Yandún explicó que la gente que camina por la 12 de Octubre no utiliza el puente por pereza. “Yo cruzo por el puente porque tengo miedo de los carros”. A Lisetth de la Torre la razón que le motivó a cruzar por el puente fue evitar la boleta de citación.
En la esquina de la 12 de Octubre y Robles, el policía Pedro Toapaxi se limitaba a observar y a advertir verbalmente a los peatones que cometen infracciones. Él no tiene citaciones porque pertenece al Servicio Urbano.