En la construcción de la Central Toachi-Pilatón intervinieron firmas de China y Rusia. Foto: Archivo / EL COMERCIO
Al expediente por presunta asociación ilícita en el caso Odebrecht se suman nuevas indagaciones. La Fiscalía pidió a Hidrotoapi, a la Corporación Eléctrica del Ecuador (Celec) y a la Empresa Pública del Agua todas las facturas, pagos, contratos y subcontratos suscritos con la empresa China International Water Electric (CWE).
Esta compañía, domiciliada en Pekín, activó una sucursal en el Ecuador el 15 de noviembre del 2010, e intervino en la construcción de la Central Hidroeléctrica Toachi-Pilatón.
Inicialmente, solo se conocía que la Fiscalía rastreaba los contratos de cinco proyectos adjudicados a Odebrecht, en los que pudo haber coimas.
En esa lista están el Poliducto Pascuales-Cuenca, la Central Manduriacu, el Acueducto La Esperanza, el Trasvase Dauvin y la Refinería del Pacífico.
Ahora se sabe que los seguimientos judiciales también apuntan a Toachi-Pilatón, uno de los 10 proyectos hidroeléctricos más grandes del país.
En diciembre del 2010, un mes después de haberse constituido en Ecuador, la compañía CWE ganó de forma directa el contrato para la obra civil de la central, por USD 240,4 millones. Cuatro años después, en marzo del 2014, Celec Hidrotoapi, la empresa estatal a cargo del proyecto, firmó un acuerdo complementario con CWE, por USD 23,6 millones.
Como parte de las investigaciones del caso Odebrecht, la Fiscalía solicitó a ocho entidades bancarias nacionales que remitan información relacionada con la apertura de cuentas
de CWE, quienes aparecen como firmas autorizadas, detalles de giros del exterior, transferencias, estados de cuenta, etc.
Uno de los bancos ya respondió a la Fiscalía. El informe está fechado al 21 de agosto del 2017. Allí se dice que la empresa extranjera abrió cuatro cuentas, entre el 20 de enero del 2011 y el 22 de septiembre del 2016. Todas se encuentran activas.
Además, revela que hasta diciembre del 2015, el total de activos de la firma era de USD 266 millones y que tenía ventas anuales por USD 118 millones.
La Fiscalía envió otro oficio a la Unidad de Análisis Financiero y Económico (Uafe). Al organismo le solicitó todos los movimientos de CWE, desde el 2010. También le pidió datos de cuentas abiertas en el sistema financiero del exterior.
En abril pasado, el SRI aseguró que cobró USD 65 millones a la compañía china por tributos aparentemente eludidos.
En ese mes, el SRI confirmó lo que ya se conocía desde un año antes, con la filtración de los Papeles de Panamá: CWE sacó USD 32,8 millones aduciendo supuestos pagos por consultorías a una firma suiza.
Pero según las investigaciones, solo el 5% de ese monto fue al país europeo; el resto llegó a una ‘offshore’ en Panamá.
La semana pasada, este Diario buscó a los representantes de CWE, para conocer su versión sobre la investigación de la Fiscalía. Se enviaron correos a las direcciones registradas en la Superintendencia de Compañías y se llamó a los números consignados. No hubo respuesta.
Además del proyecto, la firma sucursal china intervino en otras tres obras. Dos estuvieron relacionadas con el control de inundaciones en Naranjal y Cañar, en Guayas, por USD 341,6 millones. Y la tercera tuvo que ver con la construcción de 13 residencias estudiantiles y 34 casas en Yachay, por USD 6,18 millones.
En diciembre del 2017 se cumplirán siete años de la firma del contrato para la construcción de Toachi-Pilatón. Según el acuerdo inicial, la planta debía estar lista el 2015.
En contexto
La obra de Toachi-Pilatón fue adjudicada inicialmente a Odebrecht, el 2007, pero en el 2008 la brasileña fue expulsada del país. Las indagaciones señalan que Alecksey Mosquera, entonces ministro de Energía, recibió 1 millón de Odebrecht por este proyecto.