La aplicación de salvaguardias, la eliminación del 40% del aporte estatal a las pensiones jubilares, el acuerdo comercial con la Unión Europa, el escándalo de Volkswagen y el desplome del precio del petróleo fueron algunos de los acontecimientos económicos que impactaron en el 2015.
El desplome del precio del petróleo
La caída del valor del crudo complicó a los países cuya economía depende de la explotación petrolera. El precio del crudo tipo WTI, que sirve de referencia para el petróleo ecuatoriano, inició en enero de 2015 a USD 54,11 y terminó este diciembre a USD 36,53, muy por debajo del precio que el Ecuador fijo en el presupuesto para este año, un promedio de USD 79,7 por barril.
Ciudades de la Amazonía, esencialmente petroleras como Coca y Shushufindi, se vieron afectadas por este hecho. Decenas de empresas que brindaban servicio petroleros tuvieron que suspender o disminuir sus actividades y decenas de personas quedaron en la desocupación.
Aplicación de salvaguardias
El 11 de marzo de 2015 entró en vigencia una sobretasa arancelaria entre el 5% y el 45% en 2 800 partidas de importación. Según el Gobierno, el objetivo de esta medida fue fortalecer la dolarización, evitar la salida de divisas y proteger la producción ecuatoriana. Con esto se buscó evitar el impacto en la economía nacional debido a la caída del precio del petróleo, la apreciación del dólar y la consecuente depreciación del peso colombiano y el sol peruano.
La vigencia de la nueva tasa es de carácter temporal y tiene una duración de 15 meses, que está previsto termine en junio de 2016.
La aplicación de la medida no evitó que ciudades como Ipiales (Colombia) y Río Verde (Perú) se convirtieran el los centros de compra de miles de ecuatoriano que vieron en los países vecinos la posibilidad de comprar electrodométicos, artículos de aseo, alimentos, ropa, entre otros productos a menor precio gracias a las devaluación de sus monedas.
Eliminación del 40% del aporte estatal a las pensiones jubilares
El pasado 14 de abril del 2015, la Asamblea Nacional, con 91 votos a favor, aprobó la Ley para la Justicia Laboral, esta incluye la eliminación del 40% del aporte del Estado al Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS).
El texto aprobado dice “El Estado será responsable subsidiario y garantizará el pago de las pensiones del Sistema de Seguridad Social únicamente cuando el IESS no cuente con los recursos económicos para cubrir las obligaciones en curso de pago”.
Anteriormente la Ley de Seguridad Social obligaba al Estado a cubrir el 40% de las pensiones jubilares, pero según el presidente Rafael Correa, el IESS tiene superávit y no tiene sentido entregar estos recursos.
La medida provocó marchas y protestas por parte de los jubilados quienes expresaron su preocupación por la eliminación del aporte fijo por parte del Estado.
Acuerdo comercial con la Unión Europea
La Unión Europea (UE) y Ecuador firmaron, en diciembre de 2014, el acuerdo de libre comercio. En diciembre de 2015, Colombia y Perú dieron su aval para la adhesión del país al acuerdo multilateral.
En el marco de la IV Cumbre Binacional Ecuador-Colombia, celebrada el pasado 15 de diciembre, el presidente Juan Manuel Santos ratificó el apoyo al Ecuador para lograr una adhesión al acuerdo. Ese día Santos aseguró que ha dado instrucciones precisas a su Embajador ante la Unión Europea para que lleve adelante esta disposición.
Tres días después, Perú anunció, durante el Gabinete Binacional desarrollado en la ciudad peruana de Jaén, su aval para su adhesión del Ecuador al acuerdo comercial que ambos países firmaron con la Unión Europea.
Escándalo de Volkswagen
El consorcio alemán Volkswagen vivió en 2015 uno de los peores escándalos de su historia. A mediados de septiembre se conoció que la empresa colocó un software que evadía los controles ambientales en unos 11 millones de automóviles a diésel, lo que provocó la renuncia de su presidente Martin Winterkorn.
El responsable de destapar el engaño del fabricante automotriz fue el ecologista Peter Mock, director del grupo mediambiental International Council for Clean Transportation, (ICCT, por sus siglas en inglés). Todo empezó con un intento de demostrar que los controles de gases contaminantes en Europa son menos exigentes que en Estados Unidos.
Después del escándalo las ventas de los vehículos de la marca alemana cayeron en todo el mundo y sus acciones perdieron el 20% de su valor de inmediato.