Los voluntarios recogieron la basura en Playas Villamil, durante la primera jornada del Playatón de este año. Foto: Enrique Pesantes/ EL COMERCIO
Disfrutar del sol, el mar, la arena y generar 0,73 kilos de basura por día. Esa es la huella que deja un turista al visitar las playas del país, segúndatos del Ministerio del Ambiente (MAE).
Pero ese impacto se puede triplicar durante un feriado. En los días de Carnaval, mientras algunos disfrutaban -y otros ensuciaban-, Paulina Jaramillo recorría General Villamil, el balneario más concurrido de Guayas, con un saco en la mano.
“Encontramos latas, botellas, hasta un pañal. Lo peor es que limpiamos un sitio y al volver ya estaba sucio”, dijo la joven, quien participó con un grupo de amigos en la primera fase del Playatón 2016, organizado por el MAE. Ese día, 16 000 voluntarios recogieron 21 057 kilogramos de desechos en varias zonas del país.
Para el Ministerio del Ambiente, algunos factores inciden en que una playa sea más limpia o mejor conservada que otra. Por ejemplo: playas extensas, más atractivas para los turistas, con mayor cantidad de servicios; o bajo la influencia de corrientes que arrastran más desperdicios.
Y esto se puede confirmar al revisar la lista de las 10 playas más populares del país. Jambelí, en El Oro, es una de ellas. Aquí, en el Playatón del 2015 -en septiembre, por el Día Internacional de Limpieza de Playas-, se recolectaron 6 688 libras de basura. Mientras que Mompiche, en Esmeraldas, concentró 249.
Un año antes, en esta jornada mundial liderada por la ONG Ocean Conservancy, Ecuador fue el sexto país con más voluntarios entre 91 participantes: 16 573 voluntarios reunieron 51 765 kilogramos. Un año después se unieron 34 649 voluntarios para recoger 154 513 kilogramos.
“Esas cifras deberían hacernos reflexionar: ¿tenemos playas más limpias o hay más gente limpiando mientras otros ensucian?”, se pregunta la ambientalista Paula Ycaza.
Más allá de tener un ejército limpiando, Daniel Castillo, director provincial de Ambiente en Santa Elena, cree que se debe evitar ensuciar. “El visitante debe ayudar a que sus desechos no se queden”.
Generalmente, los tres cantones de Santa Elena (Salinas, La Libertad y Santa Elena) generan 70 toneladas diarias de desperdicios, cada uno. En feriados como Año Nuevo, Carnaval o Semana Santa se puede llegar a 800 toneladas diarias, en cada cantón.
“Los municipios deben, en un momento dado, sancionar a quienes ensucian las playas a través de sus ordenanzas”, sugiere Castillo.
Para María Fernanda de Lucca, directora provincial del Ambiente en Guayas, se debe llegar al turista con mensajes más claros del daño causado a los ecosistemas marinos.
“Una colilla de cigarrillo -el desecho más encontrado- tiene 200 químicos que, si llega al mar, puede contaminar más de 50 litros de agua. Y muchos peces, aves y otras especies confunden las fundas plásticas con alimento y mueren”.
En Esmeraldas, ese impacto empezó a disminuir desde el 2010, a través de planes permanentes de limpieza entre instituciones públicas y privadas, y capacitaciones a pescadores, comerciantes y hoteleros. Como resultado, Narcisa Cárdenas, directora provincial del Ambiente, explica que durante el año pasado hubo más voluntarios: de 2 900 del 2014 pasaron a
4 000.
Esmeraldas tiene 19 playas. Atacames, Tonsupa, Súa, Tonchigüe y Same son los balnearios más concurridos. Usualmente generan entre ocho y 10 toneladas diarias de basura, pero en la temporada alta la cifra puede subir hasta 25.
Las Palmas es una de la zonas con más desechos (1 200 kilogramos). Pero no todo es responsabilidad de los bañistas, como indica Renato Tambaco, técnico en temas ambientales.
Por su cercanía al río Esmeraldas, en invierno concentra entre 100 y 300 toneladas de palizadas. Pero las fundas, vasos plásticos y vidrios no pasan de 150 libras diarias.
Una de las playas de Manabí es un ejemplo de conservación. El año pasado, el Ministerio de Turismo otorgó el reconocimiento de la playa más limpia a Los Frailes, en el Parque Nacional Machalilla La labor de losguardaparques pesó en esa designación.
Édgar Peñafiel, director provincial del Ambiente, explica que las jornadas de limpieza son permanentes. Y que no solo se enfocan en recoger más desechos sino crear una conciencia ambiental de conservación.
Durante el Carnaval,1 491 voluntarios recuperaron 2 220 kilos de basura en 12 playas. El Murciélago y Pedernales agruparon cerca del 90% de esos desechos.
Litoral
Los turistas botan botellas plásticas, colillas de cigarrillos y hasta pañales de bebé. En feriados aumenta la basura.
En contexto
Desde el 2010, el país mantiene jornadas de limpieza de playas. Para este año se organizan tres: una ejecutada en Carnaval, otra para Semana Santa y otra para septiembre. En cada provincia costera se trabaja en programas permanentes de conservación.