Reds. Sociedad y Política
El Directorio del Banco del Afiliado quedó oficialmente conformado. Ayer, el presidente la Asamblea, Fernando Cordero, posesionó a cuatro vocales (principales y alternos) de afiliados activos y jubilados.
Omar Serrano y la suplente Fátima Solabarria son representantes de los asegurados. Mientras que Bolívar Cruz y el suplente Luis Cazar son delegados de los pensionistas.
Cuatro vocales
tendrá el Directorio del Banco. Aún no se sabe cuándo se reunirán por primera vez.
Serrano y Cruz, quienes ya han trabajado en el IESS, aseguraron que “los afiliados pueden estar tranquilos porque velarán para que el Banco no sea politizado o se convierta en una caja chica del Gobierno”. Los funcionarios dijeron que para empezar con sus actividades primero esperarán la reunión del Directorio del Banco.
Este organismo también está integrado por Leonardo Vicuña, delegado del Ejecutivo, y Ramiro González, del Consejo Directivo del Seguro Social. Precisamente él presidirá el Directorio de la naciente entidad financiera.
La primera tarea de los vocales será redactar el estatuto interno, que luego será aprobado por la Superintendencia de Bancos. Para eso tienen plazos, pero no se dieron detalles. Luego el Directorio definirá el monto del capital con el cual empezará a trabajar y también designarán a un gerente.
La nueva entidad, cuya matriz estará en Quito, captará los créditos quirografarios, hipotecarios y los de monte de piedad. Estos son entregados por separado en el IESS.
Cruz señaló además que administrarán el Hotel Quito, el Ingenio Azucarero y la Cemento Guapán. Estas tres empresas son de propiedad del IESS y actualmente tienen administradores independientes. Ayer se aclaró que no se comprará ningún banco conformado, sino que se creará uno.
Serrano, quien también gerenció la Dirección de Desarrollo Institucional (DDI) del IESS, ingresó a la entidad en la administración de Héctor Égüez, como director del instituto. Y Cruz indicó que fue director financiero del IESS.