Con distintos objetos, los voluntarios trataron de cubrir del sol y el calor al tiburón ballena. Foto: Cortesía/ David Hidalgo.
Biólogos de Manta y Galápagos practican la autopsia al tiburón ballena que varó en playa Santa Marianita en el cantón Manta.
Este análisis se realiza desde la mañana del 14 de abril del 2015 en la provincia de Manabí, en las costas de Ecuador.
El pez, de siete metros de largo y dos toneladas y media de peso, murió el 13 de abril del 2015 después de las 13:00, tras los intentos de 50 voluntarios que se agruparon para tratar de devolverlo al mar y salvarle la vida.
La autopsia fue confirmada por Orfa Cabezas, directora de la Secretaría Nacional de Gestión de Riesgo de Manabí. Según la funcionaria fue necesario que llegaran biólogos desde Galápagos para que realizaran la necropsia y así saber las cuáles son causas del fallecimiento del animal.
Mientras tanto, con la ayuda de una retroexcavadora de brazo largo se cavó un hueco de más de 10 metros de largo por cinco de profundidad, comentó Mario Zambrano, habitante del lugar y uno de los voluntarios. Al borde de una quebrada conocida como la Calabaza, ubicada más hacia el sur del enclave marino de Santa Marianita, sería enterrada esta tarde del martes 14 de abril, dijo Zambrano.
Para Zambrano, la jornada del 13 de abril le dejó una lección básica. “Cuando se quiere se puede, nosotros los voluntarios pusimos todo de nuestra parte, sacamos cavos de nuestras casas, nadamos entre las fuertes olas con peligro de ser arrojados hacia las rocas, lo lamentable al final es que la gata (como apodan los pescadores al tiburón ballena) no sobrevivió”.