Quito. AFP y Redacción Negocios
Un total de 28 entidades financieras del país fueron cerradas por la Superintendencia de Bancos tras verse afectadas por la mayor crisis bancaria que enfrentó el país entre 1998 y 1999, informó ayer la superintendenta Gloria Sabando.
Señaló que el jueves concluyó el proceso de liquidación 28 instituciones que enfrentaron problemas de liquidez, mientras que la “extinción legal” de las últimas cinco en crisis se dará durante el primer trimestre de 2010.
Entre los bancos aún por ser liquidados figura Filanbanco, el cual dejó pérdidas por USD 604,6 millones al Estado. Su cierre, junto con el de Progreso, Los Andes, Benalcázar y Tecfinsa se concretará a lo largo de los próximos tres meses, una vez que se desmonten problemas legales y financieros que frenaron su cierre, “debido a la magnitud y complejidad de sus operaciones”, explicó ayer la Asesoría General de Comunicació de la Superintendencia de Bancos y Seguros en un comunicado.
“La liquidación marca un hito en el proceso de cierre de la crisis financiera que se desató en 1999”, apuntó Sabando.
Agregó que una vez que se complete la liquidación, el Banco Central administrará una cartera de más de USD 2 000 de dólares y deberá actuar en más de 6 000 juicios de coactiva, insolvencia y quiebra para recuperar recursos.
El documento difundido ayer también apunta que se encuentra en proceso el listado de directores, administradores, funcionarios o empleados que hubieren causado perjuicios a las 33 instituciones (16 bancos, 10 financieras, 4 mutualistas y 3 cooperativas) o a terceros para que respondan por las pérdidas ocasionadas con sus propios bienes, a través incluso de acciones de coactiva.
La crisis bancaria que estalló en 1998 y derivó en la dolarización de la economía ecuatoriana (en marzo de 2000) , significó pérdidas por unos USD 8 600 millones a Ecuador, según el presidente Rafael Correa.
Con miras a recuperar el dinero que debió entregar a los depositantes, el Estado asumió el control de empresas y medios de comunicación como el diario El Telégrafo y los canales de televisión TC y Gama TV, que eran propiedad de banqueros.
La Superintendencia de Bancos y Seguros informó, asimismo, que Ecuador aplicará a partir del segundo trimestre del año un nuevo e integrado sistema de supervisión y evaluación financiera que reforzará el control sobre las instituciones del mercado, identificará sus niveles de exposición al riesgo y las acciones preventivas para garantizar su solidez y precautelar el interés de los depositantes en una eventual quiebra.
La Superintendencia de Bancos y Seguros evaluará obligatoriamente desde abril de 2010 a las instituciones financieras del país bajo los parámetros del Manual Único de Supervisión (MUS). Así controlará el cumplimiento de las mejores prácticas de prudencia y solvencia financiera acorde con una metodología y notación que abarcará su desempeño en los campos de Gobierno Corporativo, Administración de Riesgos, Evaluación Económico- Financiera y Cumplimiento Normativo (GREC).
Este mecanismo otorgará calificaciones uniformes a cada una de las instituciones, con base en la evaluación de sus niveles de exposición a operaciones de riesgo y los resultados de las inspecciones que aplicará la Superintendencia de Bancos y Seguros
Los estados financieros, al día
De acuerdo con un comunicado publicado ayer en la página en Internet de la Superintendencia de Bancos, la nómina de entidades liquidadas está integrada por las instituciones Previsión y Seguridad, Guayaquil, Ecuacorp, Finiber, Ecuacambio, 8 de Septiembre, Unifem, Manabí, Mercantil Unido, Valorfinsa, Confianza, Intermil, Manabí, Finagro, Hemisferio, Serfin, Descuento, Amerca, Bancomex, Unión, Solbanco, Occidente, Financorp, Azuay, Crédito, Tungurahua, Préstamos y Popular. Los bancos, cooperativas, mutualistas y sociedades financieras cerraron sus estados financieros al 30 de diciembre.
La Superintendencia de Bancos y Seguros también está consolidando las pérdidas de las instituciones y, con el respaldo de los informes de los liquidadores y previa autorización de la Junta Bancaria, proceder a tomar a su cargo “los bienes, acciones y participaciones de las compañías y empresas de propiedad de los accionistas” para que cubran, parcial o totalmente, el dinero adeudado a los depositantes.