Gustavo Lovato. Director musical de la Casa de la Música
Redacción Cultura
¿Cuál es la principal característica de las sonatas para violín y piano de Beethoven?
Desde el punto de vista del balance y del equilibrio entre los dos instrumentos, son composiciones difíciles. El violín es delicado, de sonoridad pequeña, y se enfrenta a un sonido grande como el del piano. Pero el trabajo de Beethoven se sintetiza en el conocimiento de los dos instrumentos, los cuales interpretaba con un alto nivel técnico.
¿Se marca en estas piezas el paso del clasicismo al romanticismo?, ¿cómo?
Definitivamente. Las cuatro primeras sonatas poseen un carácter surgido en la tradición clásica del siglo XVIII. Las tres siguientes pertenecen a un estado más avanzado; aquí, Beethoven presenta un lenguaje personal más seguro de sí mismo. Las tres finales son más maduras y muestran una visión más completa de la música. Beethoven es un compositor con mucha personalidad; en estas sonatas, si bien el violín tiene momentos complicados, el piano no solo acompaña, sino que es preponderante, lo cual es señal de esta transición.
¿Por qué está aquí?
Su trayectoria. Es Doctor en Artes Musicales y Máster en Literatura, por la Universidad de Alabama. En el país estudió en el Conservatorio Nacional de Música. Desde 2005 es Director Musical de la Casa de la Música.
Su punto de vista. A Beethoven debemos el inicio del proceso evolutivo de la música.
¿Se puede decir que algunas sonatas son de mayor calidad que otras?
No, porque la valoración debe hacerse desde cada momento histórico. En la vida de Beethoven se diferencian tres etapas: una temprana, una media y una avanzada. No se puede comparar a un Beethoven joven, en cuyas obras se siente la influencia clásica de sus maestros, y a un Beethoven más maduro y visionario, a quien debemos el inicio de todo el proceso evolutivo de la música.
¿Estas 10 piezas constituyen un ciclo?
No propiamente, cada una de ellas maneja un tema independiente. Un verdadero ciclo mantiene un mismo hilo conductor. Incluso la quinta sonata o ‘Primavera’ presenta ideas extramusicales, al adherirle un título que predispone su apreciación.
¿Cómo se manifiestan las 10 sonatas para violín y piano, dentro del conjunto total de la obra de L.v. Beethoven?
En comparación con las sinfonías hablamos de fuerzas distintas. Las sonatas tienen una fuerza menor, pues se trata de música de cámara, es decir, hecha para el deleite en pequeños ambientes; hay que recordar que la música de cámara proviene de círculos aristocráticos, de amistades del compositor o de miembros de la corte. Las sinfonías tienen otra dimensión, en ellas Beethoven es un innovador, hace propuestas que rebasan la tradición.
¿Y dentro de la historia de la música?
En cierto sentido son paradigmáticas, incluso más que las sonatas de Haydn o Mozart; están bien hechas y quedan como modelos para creadores posteriores. Brahms basa su composición para violín y piano en esta forma de equilibrio entre los instrumentos que logra Beethoven, al igual que Shostakovich, un compositor más moderno.
Si la música de cámara se desarrolló en círculos elitistas, ¿cuán importantes fueron las dedicatorias en las composiciones?
Muy importantes, los compositores trabajaban para la aristocracia. Beethoven se relacionó con sus integrantes desde muy temprano, ellos financiaban su vida. Sus composiciones están dedicadas a duques, condes, zares y otros miembros de la corte. De igual manera dedicó sus trabajos a sus maestros, por ejemplo, las primeras tres sonatas para violín y piano son para Antonio Salieri. A pesar de ello, Beethoven fue un compositor independiente.
¿Cómo se define la sonata?
Hay que diferenciar el género sonata, de la forma sonata. El primero define las fuerzas de los instrumentos, su concepto se restringe a la interpretación instrumental, en oposición a la cantata, que es vocal. En cambio, la forma sonata es una manera de organización de las ideas musicales en tres partes: la exposición de los temas, que generalmente se contrastan en carácter (por ejemplo, un tema épico frente a un tema lírico), el desarrollo de esos tópicos, y la reexposición de las ideas primeras.
¿En cuál categoría se enmarcan estas 10 piezas de Beethoven?
En el género sonata. Cada una de estas piezas está compuesta por movimientos. Siete de ellas se dividen en tres movimientos: uno rápido, uno lento y otro rápido, con una estructura ligada a la tradición italiana. Mientras que las sonatas 5, 7 y 10 insertan un movimiento más, un aspecto que se relaciona con la tradición germana. Durante las conferencias preconcierto, de los tres días, en la Casa de la Música, 30 min. antes de la presentación de Ilya Gringolts y Alekzandar Madzar hablaré, entre otros tópicos, sobre las diferencias.