De izquierda a derecha los impulsores de editorial universitaria Eoántropo Cartonera: Ronaldo Peñaherrera, Analy de la Vera, Anaissa Moreira, Idania Yela y Rubén Darío Macías. Foto: Mario Fausto / EL COMERCIO
Dos revistas digitales y una editorial de libros artesanales hacen parte de los programas editoriales lanzados por estudiantes del semestre de “nivelación emblemática” de la carrera de literatura de la Universidad de las Artes (UArtes).
El primer libro de Eoántropo Cartonera lleva por título ‘Cino’ y es un sencillo volumen cosido a mano, de cartón y papel, con una silueta femenina en la tapa roja. Se trata de una selección de poemas de 21 páginas de la poeta guayaquileña Maritza Cino, profesora universitaria. Los primeros 50 ejemplares fueron puestos a la venta en USD 3 –el costo de producción- en el campus universitario.
“La cartonera tiene un fin social que es hacer llegar la literatura a la gente que no puede comprarse un libro en las grandes tiendas o de las grandes editoriales”, indicó Idania Yela, guayaquileña de 28 años, una de las impulsoras de la editorial.
Esta tendencia de libros artesanales surgió en la crisis argentina en 2003 y se ha expandido de forma paulatina a toda Latinoamérica. Eoántropo busca publicar poesía y narrativa tanto de estudiantes como de profesores de la entidad, pero también a escritores inéditos o con publicaciones fuera del ámbito universitario. La idea es actuar como puente entre autores y lectores.
Los proyectos de final de curso de la Universidad son parte del programa “integrador de saberes” y están ligados a una evaluación del período lectivo, pero los estudiantes de la etapa preuniversitaria defienden la continuidad de sus productos.
“Somos la primera cartonera de la Universidad. Es algo que queremos mantener. Y nos motiva el hecho de que ya muchos autores se han comunicado con nosotros porque quieren que los editemos y publiquemos”, señaló Analy de la Vera, estudiante guayaquileña de 18 años.
Un taller con materiales reciclables que integrantes de la cartonera Dadaif -una de las de más tradición en Guayaquil- impartieron en la Universidad reafirmó el proyecto de los estudiantes. Y el nombre de la editorial, Eoántropo, que hace referencia a “una nueva especie”, surgió según los alumnos de un texto del escritor Ernesto Giménez Caballero, que relacionó el descubrimiento de un fósil del denominado hombre auroral, Eoántropo, con el quiebre entre la tradición y el arte nuevo.
La editora de libros de cartón ha definido cinco sellos. Homoesencialis estará dedicado a narrativa; Homoeréctus, a poesía; Homonatus, para nuevos escritores; Homoimagins, a la literatura infantil y Homomalakitus, solo para estudiantes de la UArtes.
Los alumnos de la nivelación también lanzaron la revista literaria ‘El Insomne’, que busca la difusión en línea de los trabajos artísticos de los estudiantes y la promoción de eventos culturales universitarios.
Mientras que la revista digital El zaguán de aluminio abre el espectro y aborda las artes que ofrece por ahora el ‘alma máter’: música, literatura y cine. El proyecto busca visibilizar ante la comunidad universitaria y ante la sociedad a los estudiantes que tienen una carrera previa, antes de su ingreso a la UArtes.
“Existe mucho talento y creemos que cada año se van a incorporar estudiantes con cosas que contar y proyectos que mostrar”, indicó Merwin Cabezas (18), uno de los impulsores de la revista.
“La idea es que los estudiantes puedan conocerse entre ellos. Nuestra plataforma puede ser útil para crear vínculos, y para que surjan lazos de cohesión en la creación artística”, expuso por su parte Michael Santana, otavaleño de 19 años, otro de los responsables de El zaguán de aluminio.