En varios terrenos pertenecientes al Parque Samanes se encuentra maquinaria pesada. Foto: Gabriel Proaño para EL COMERCIO.
El sonido de equipo pesado trabajando sobre terreno pedregoso caracterizó la jornada de este lunes 1 de junio del 2015. El escenario, terrenos aledaños a lo actual edificado en el Parque Samanes, norte de Guayaquil. Allí, finalmente, el papa Francisco oficiará una misa campal durante su visita al Puerto Principal, desde las 11:15 del próximo lunes 6 de julio.
El sitio fue confirmado por la Santa Sede luego del pedido de cambio tramitado a través de la Cancillería, debido a que el Gobierno solo podría garantizar la seguridad para 11 000 asistentes al Santuario de la Divina Misericordia, en el km 26 de la vía a la Costa, lugar escogido inicialmente por el Sumo Pontífice.
Maquinaria como tractores, rodillos y retroexcavadoras están dispersos en varios frentes de terrenos pertenecientes al Parque Samanes, donde está previsto a futuro levantar la tercera etapa del proyecto.
El terreno elegido está detrás de las canchas de entrenamiento adjuntas al estadio Cristian Benítez, contiguo a las lagunas artificiales de la segunda fase. El área se extiende hasta la autopista Santa Narcisa de Jesús.
Son 50 hectáreas que, según la ministra de Desarrollo Urbano y Vivienda (Miduvi), María de los Ángeles Duarte, estarán desbrozadas y compactadas el 15 de junio. En ese terreno se podrá albergar a un millón de fieles, e incluso un poco más, según el canciller Ricardo Patiño.
El Miduvi y el Ministerio de Transporte y Obras Públicas tienen a su cargo los trabajos de preparación del terreno que es contiguo al que, 30 años atrás, llegó el papa Juan Pablo II para brindar una misa campal durante su visita campal a Guayaquil. En el sitio se edificó una iglesia y junto a la misma hay una gran cruz.
Cerca de allí será levantado un templete desde donde el papa Francisco ofrecerá la misa. Además se acondicionarán calles internas que separarán los diferentes cuadrantes en los que serán ubicados los fieles según las diversas parroquias o de acuerdo a como vayan llegando. Por esas vías circulará el vehículo que transportará al Pontífice.
Hasta allí se trasladará la liturgia que fue planificada inicialmente para el Santuario del Señor de la Divina Misericordia, según informó el Arzobispo de Guayaquil, Antonio Arregui.
Eso implica, por ejemplo, toda la organización de control por parte de los 5 000 voluntarios que se aspira a reclutar hasta este sábado en que se vence el plazo para las inscripciones; la instalación de por lo menos 1 50 puestos de auxilio para atender emergencias, capillas del Santísimo así como toda una planificación para el momento de la eucaristía masiva.