La decana de la Facultad de Psicología de la Universidad Católica, Marie France Merlyn Sacoto señala que uno de los factores detrás del suicidio es la depresión. Foto: Vicente Costales/ EL COMERCIO.
Ayer 1 de octubre, Giovanni E., de 37 años, cayó desde el edificio del Consejo de la Judicatura, que tiene 15 pisos. Allí trabajaba como mensajero desde hace dos años. Aún la Policía Nacional investiga las causas del hecho. Pero al haber ocurrido en la av. 12 de Octubre y Francisco Salazar, zona bancaria, hotelera, universitaria, provocó la alarma ciudadana.
Ayer, decenas de personas que observaron la escena, comentaban acerca de si pudo o no ser un suicidio. Alexandra Bonilla y Alfredo Avilés vieron caer al hombre, que el 30 de septiembre había cumplido 37 años. Vestía camisa celeste y pantalón jean. Ella tiene un puesto de venta de confites en la esquina del edificio y él bajaba de un bus en donde vendía caramelos. Estaban en shock.
La decana de la Facultad de Psicología de la Universidad Católica, Marie France Merlyn Sacoto, señaló que uno de los factores detrás del suicidio es la depresión. Aunque recordó que también hay otros tipos de suicidios, como los que se hacen para reivindicar razones religiosas.
El suicidio es la fase final de un proceso que se gesta en varios meses, la persona lo ve como una salida. La psicóloga también explica que hay franjas de edad de alto riesgo de cometer suicidio para el género masculino: 30 a 49 años y de 20 a 24. En el caso de mujeres ocurre más que nada en adolescentes.
Normalmente la depresión se evidencia en ciertas conductas. La persona que la sufre se encapsula, no conversa mucho. “Quienes hablan de morir o e matarse, muchas veces no pasan al acto, no tienen una real planificación, solo fantasean con la idea, verbalizarlo es un llamado de atención y ayuda a que otros intervengan. Así hay menor probabilidad de que alguien termine suicidándose”, explica Marie France Merlyn Sacoto.
¿Por qué? Según ella, el suicida no tiene contacto social, se retrae, no cuenta sus problemas y la acumulación interna de ansiedad y tristeza es lo que le lleva a cometer el acto suicida.
¿Hay diferencias entre los métodos que escogen hombres y mujeres suicidas? Los hombres escogen métodos más violentos como precipitación o las armas. Pero las mujeres toman pastillas y usan otros métodos, que permiten auxiliarlas.
La psicóloga también recordó que hace un par de años, una joven se suicidó lanzándose desde una de las torres de la Universidad Católica. No era estudiante de ese centro sino de la Universidad Politécnica Salesiana.
“Los suicidas no escogen un lugar o un método al azar. Si deciden matarse precipitándose desde lo alto buscan un edificio de varios pisos. También espacios significativos”. Ayer, mientras la Policía tenía cercada la zona en donde cayó el hombre, algunas personas con curiosidad se preguntaban si tendría hijos, si estaría soltero, si tendría deudas…
Para Marie France Merlyn Sacoto, un suicida perdió toda perspectiva de futuro. Está muy deprimido, no ve las cosas positivas. Es como si cayera en un agujero negro. No piensan en que debe vivir por su familia, para proveerles, las cosas pierden significado, no existen nada que le sostenga y le vincula a la vida.
Los familiares y amigos no deben sentir culpabilidad porque no supieron leer señales. El suicida no verbaliza, no dice me siento deprimido, es alguien que comunica menos.
Toda muerte violenta, apunta la psicóloga, produce un shock. Pero enfrentar el suicidio de un cercano es diferente a una muerte por accidente porque no sobreviene por la voluntad propia. Los hijos y la familia tiene que atravesar el duelo, deberían ir a un espacio para que expresen el dolor, no sirve de nada ocultarlo porque luego se enteran.