Cheops despegará en el cohete portador Soyuz desde el puerto espacial europeo de Kourou (Guayana Francesa). Foto: Web Agencia Espacial Europea
El satélite de la Agencia Espacial Europea (ESA, por sus siglas en inglés) Cheops, que explorará exoplanetas, será lanzado a mediados de diciembre del 2019 desde la Guayana Francesa y empezará sus observaciones en abril del 2020, anunciaron este lunes 16 de septiembre sus responsables.
Inicialmente se había previsto el lanzamiento entre octubre y noviembre, aunque la nueva fecha fue desvelada este lunes en rueda de prensa por la científica Kate Isaak, una de las responsables de la misión, durante un encuentro de planetólogos europeos y estadounidenses que se celebra esta semana en Ginebra.
El satélite, mayoritariamente de fabricación española, “se encuentra en Madrid, donde la calibración de los instrumentos ya terminó, las simulaciones y ensayos están en curso y el programa científico se encuentra en su fase final“, señaló Isaak.
El Cheops es un telescopio espacial que estudiará exoplanetas mediante la alteración lumínica que producen al pasar por delante de las estrellas que orbitan (el llamado tránsito planetario, que comenzó a utilizarse hace exactamente 20 años).
Otro responsable del proyecto Willy Benz (de la Universidad de Berna) explicó hoy que el objetivo de Cheops no es tanto descubrir nuevos planetas lejos del Sistema Solar sino saber más de los más de 4 000 que ya se conocen.
“Nos interesa más saber de qué están hechos o cuál es su temperatura“, así como la composición de su atmósfera, si poseen lunas propias o anillos como los de Saturno, explicó a los periodistas.
Cheops será el primero de un proyecto de la ESA para el estudio de exoplanetas que continuará con el lanzamiento de otras dos sondas, Plato y Ariel, a finales de la próxima década.
El proyecto Cheops, en el que participan 10 países de la ESA junto a Suiza, echó a andar en 2014, y en él la agencia europea aplicó medidas de contención presupuestaria que limitan el coste máximo de este tipo de misiones a unos USD 50 millones y el tiempo de construcción a cuatro o cinco años.
Construido por Airbus Defence and Space, el satélite es el primero de la ESA fabricado mayoritariamente en España (más del 50% de sus componentes se desarrollaron en territorio español) y será controlado desde las instalaciones del Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial (INTA) a las afueras de Madrid.
Esta diseñado para operar durante unos tres años y se enfocará especialmente en el estudio de unos 300 de los 4 000 exoplanetas conocidos, aquellos de tamaño más pequeño y por tanto más complejos de estudiar, con masas situadas entre la de la Tierra y la de Neptuno.
Será puesto en órbita por cohetes propulsores rusos Soyuz-Fregat, y en el proyecto han participado científicos de más de 30 instituciones de los países implicados.